Recientemente James Corden visitó al presidente de los Estados Unidos, Joe Biden en la Casa Blanca, el divertido recorrido en la residencia del mandatario quedó marcado por las bromas y los espontáneos comentarios del comediante.
Lo primero que hizo el comediante en The Late Late Show with James Corden fue presentarse en el salón oval e informarle a Biden que sería su asistente, por lo que le preguntó si necesitaba algo. El mandatario se negó rotundamente.
Inquieto y presuroso, James Corden corrió por un ramo de flores hechas de gomitas con sabor a frutas y otros dulces, además, le informó que su próxima reunión sería en 28 minutos. Con cierto humor, el presidente Joe Biden preguntó a la cámara en tono de broma: “¿Quién es este chico? ¿Qué rayos es el Late Late Show?”
Después del obsequio, Corden colocó sin permiso su fotografía con Harry Styles en una de las mesas. Posteriormente, irrumpió en la cocina de la Casa Blanca y aseguró que necesitaba probar el frappé del presidente para asegurarse de que no estuviera envenenado, es decir, por motivos de seguridad alimentaria.
Una vez que Joe Biden le enseñó a Corden una de las fotografías de su familia, comenzó a hablar con Jen Psaki, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, quien le hizo algunas notas sobre la administración, las cuales fueron “La guerra con Rusia, mal”, “CDC (Centros de Control), bien”; “Economía fuerte”, “La diplomacia es buena”.
Sin embargo, las prioridades de Corden parecían ser otras en cuanto a tópicos más relajados, pues le preguntó si el presidente estaba a favor de forzar una reunión de One Direction. “¿Deberían ser secuestrados, juntados y obligados a tocar juntos de nuevo una última vez?”, preguntó.
Posteriormente la asistente afirmó que eso sería demasiado turbio para la Casa Blanca. James Corden también le preguntó que si el presidente Joe Biden solía ver el show de las hermanas Kardashian, a lo que la secretaria respondió que no tenía tiempo para disfrutar del reality.
Tras dejar en claro el tema del entretenimiento, el presentador pidió “bendiciones” a C. J. Craig para decir “la verdad y nada más que la verdad”, pues estaba a punto de simular una conferencia de prensa en el salón destinado para ello.
Ante el bombardeo de preguntas sobre temas complejos de la política y el gobierno estadounidense, el conductor del show mencionó “Creo que no nos corresponde ni a ti ni a mí hablar sobre quién o qué está hablando el presidente”.
Incluso le pidió a un reportero de la agencia Reuters llamado Steve Holland que cantara la pregunta, causando las risas del resto de asistentes.
En su regreso a la cocina, Corden logró preparar un sándwich para el almuerzo de los visitantes a la residencia de los presidentes de Estados Unidos. Como el presentador estaba estresándose demasiado, tomó un refrescante “trago” de helado directamente de la máquina expendedora.
En una escena al interior del salón oval de la Casa Blanca, Corden le preguntó a Biden el tiempo que le tomaba obtener un helado si así lo deseaba, por lo que el mandatario se limitó a apretar un botón y esperar el pedido, de inmediato, una asistente le llevó una paleta de hielo.
En algún punto de la divertida e inusual visita, una persona llamó a Joe Biden y al tomar el teléfono, respondió: “Si, así es, el sigue aquí, te llamo cuando ya se haya ido”. Pese a ello, el presentador no se rindió en generar un ambiente de confianza y logró que Biden se pusiera unas gafas oscuras mientras le compartía otras a juego.
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