Tom Holland inició su carrera artística en el mundo de la danza a los 11 años. Con una extensa trayectoria sin días de descanso, en muy poco tiempo se convirtió en uno de los intérpretes más importantes de su generación. A los 25 años ya es el actor más taquillero.
Recién salido del suceso de “Spider-Man: No way home”, la tercera entrega sobre el Hombre Araña que lleva recaudados más de mil millones de dólares en todo el mundo, el londinense volvió a la acción como Nathan Drake en la adaptación cinematográfica del videojuego “Uncharted”, que está siendo otro autentico éxito. Para este último papel realizó la acrobacia física más dura que le tocó en un rodaje, pasando casi todos los días durante cinco semanas en un estudio cableado a 31 metros del suelo. “Fue absolutamente brutal”.
A los 14 debutó en el cine en “Lo imposible”, del catalán Juan Antonio Bayona. Pero la fama internacional le llegaría en 2016 cuando se anuncia que tras Tobey Maguire y Andrew Garfield, es el elegido para ponerse el traje del famoso superhéroe en “Capitán América: Civil War”. Un cotizado papel que consiguió a los 19 años gracias a su talento para las acrobacias y a una lectura de guion que improvisó con el mismísimo Robert Downey Jr.
En el mejor momento de su meteórica carrera, la estrella de Marvel ha decidido que se tomará un descanso de la actuación después de siete años sin parar de filmar y que no sabe qué va pasar después. Necesita volver a casa y ser un chico normal por un tiempo.
El chico acosado en el colegio que se convirtió en Spider-Man
Tom Holland nació el 1° de junio de 1996 en una casa de clase media al este de Londres. Es el mayor de cuatro hermanos y su familia siempre ha estado relacionada con el arte. De niño le gustaba bailar al ritmo de Janet Jackson. Fue su madre, fotógrafa, la que contrató a un profesor de baile para que su hijo empezara a estudiar danza clásica en el garage de su casa y luego lo inscribió en clases de hip-hop. Así fue como este niño extremadamente delgado y bajito comenzó a marcar su camino en el mundo de las artes escénicas. Su tremendo potencial fue descubierto de inmediato por la coreógrafa Lynne Page.
Su amor por el baile y el teatro lo empujó a audicionar para integrarse al elenco de la obra musical de “Billy Elliot”. Tras ocho pruebas y dos años de arduo entrenamiento con los mejores profesores del país, Tom debutó a los 12 años en el escenario del West End londinense, haciendo del mejor amigo de Billy Elliot, pero pronto obtuvo el papel estelar.
“Cuando comencé a hacer audiciones, era demasiado pequeño y no podía bailar. Finalmente conseguí un lugar en el escenario. Me encantaba el ballet. Entrené durante dos años. Hice una audición cada seis meses para Billy Elliot y finalmente obtuve el trabajo. Estoy muy feliz de haber tenido ese entrenamiento. Ha sido muy valioso para mi carrera y lo he usado en casi todo lo que he hecho desde entonces”, le contó a The Hollywood Reporter.
Y así como Billy Elliot sufría bullying, a Tom le pasó lo mismo. Cuando comenzó su camino para convertirse en una estrella, se enfrentó a mucho maltrato por parte de sus compañeros de colegio, quienes no entendían como un varón podía destacarse en el ballet.
Holland no tiene un recuerdo feliz de esos últimos años de la escuela secundaria. “De los 14 a los 17 no fue fácil. Mi adolescencia fue una época dura. Como hacía ballet la gente se creía que era gay. ¿Y qué si lo soy? No soy gay, pero qué importa”, detalló sobre esa difícil etapa de su vida. “Hubo momentos en los que me hacían bullying. Pero no pudieron golpearme lo suficientemente fuerte como para impedir que lo haga”, relató el actor a la revista People.
Las experiencias de Holland con el acoso escolar lo ayudaron a relacionarse con su alter ego Peter Parker, un adolescente geek que, cuando no está salvando el mundo, se enfrenta a otro escenario difícil: la escuela secundaria. “Yo, como Peter, acepté que no era el chico genial en la escuela y simplemente encontré mi grupo de amigos y seguí adelante”, dijo.
Como parte de la promoción de “Spider-Man: De regreso a casa” (2017), Holland compitió contra Zendaya en el programa Lip Sync Battle, donde bailó al ritmo de “Umbrella” de Rihanna. Su impactante presentación es hasta el día recordada en las redes sociales.
El vergonzoso pedido de su madre y un trabajo de camarero que duró poco
Holland es uno de los actores de moda. Todo lo que cuenta o hace se convierte en noticia. En una reciente entrevista televisiva, la estrella británica contó un vergonzoso pedido que su madre le hizo en secreto a los productores de “Spider-Man”.
Como buen actor y queriendo hacer alarde de su profesionalidad, Tom nunca se quejó de las largas e intensas jornadas de trabajo vestido como superhéroe de Marvel. “El traje es muy difícil de quitar porque no tiene cierre”, explicó. “Era joven y quería impresionar al estudio, por eso, no quería que pensaran que necesitaba descansos para ir al baño”.
Uno de esos días, el actor llamó a su madre y le explicó lo que le estaba ocurriendo: “En una de mis llamadas diarias a mi mamá le dije: ‘Estoy pasándolo mal. Trabajo todos los días y, como uso el traje, no puedo ir al baño’”, recordó Holland. Pero la historia no quedó ahí: “Dos días después, uno de los productores se me acercó y me dijo: ‘¿Cómo están tus riñones?’”.
El actor contó que, sorprendido por la curiosa pregunta, le consultó a qué se debía su interés. “Bueno, es que tu mamá nos llamó el otro día”, le confesó. “Sí, mi madre llamó al estudio más grande del mundo y dijo: ‘¡Dénle a mi hijo más descansos para ir al baño!’”.
Tom suele contar sin vergüenza situaciones que a veces no lo dejan muy bien parado. En una de las tantas entrevistas que brindaron Holland y Zendaya, el actor se despachó con una anécdota escatológica. “Sí, me tiré una flatulencia sobre Zendaya, desafortunadamente”, sorprendió con semejante confesión. Y justificó: “Es duro... El traje es ajustado. El arnés aprieta”. Una desagradable historia que fue confirmada por su novia y compañera de elenco.
Pero al actor también le gusta exponer públicamente a sus colegas.
En su visita al programa de Seth Meyers, Holland dijo entre risas que uno de sus compañeros en “Spider-Man: No Way Home” usó un traje con un trasero falso. Y luego invitó a los fans a que descifraran de quién se trataba, si de Andrew Garfield o Tobey Maguire. “Recuerdo estar en el set y pensar: ‘Eso no es real’”, añadió como para dejar en claro que no fue él quien necesitó un poco de ayuda para rellenar su traje con una prótesis.
La película de Marvel logró crear una gran expectativa, pues hasta antes del estreno no se sabía con exactitud si Garfield y Maguire actuarían junto a Holland. Sony Pictures y Marvel Studios decidieron mantener en secreto los regresos de los ex Peter Parker a la pantalla pero no lo consiguieron. Terminó siendo el secreto peor guardado de todo Hollywood.
Durante la misma entrevista, Tom confesó que no se sintió nada cómodo siendo cómplice de esa situación. ”Soy una persona muy honesta por naturaleza. Esto me ha metido alguna vez en problemas. Durante la gira de prensa los periodistas me preguntaban e insistían sobre Tobey Maguire y Andrew Garfield. Y yo siempre lo negaba y pedía que dejaran de preguntarme por eso”, dijo. “Después me iba a casa y apenas podía dormir. Terminaba llamando a mi madre y diciéndole que me sentía culpable por decir todas esas mentiras”.
Para “Uncharted”, su última película en la que comparte pantalla con Mark Wahlberg y Antonio Banderas, el actor se preparó muy bien para su papel. Tanto que hasta tomó clases de barman y fue camarero de incógnito en un bar de Londres … hasta que lo despidieron.
“Una de mis cosas favoritas sobre lo que hacemos para ganarnos la vida es cuando tienes la oportunidad de aprender una nueva habilidad. Fui a una escuela de coctelería y terminé haciendo algunos turnos en un bar en Londres. Fue muy divertido”, reveló el actor en una entrevista radial. El problema fue que tener a una estrella conocida en todo el mundo sirviendo copas no terminó bien. La gente comenzó a reconocerlo y quedó al descubierto.
Tom mantuvo en secreto su trabajo de campo y nadie del bar se dio cuenta de que tenían a un millonario trabajando detrás de la barra. De hecho, a su jefe no le hizo mucha gracia cuando se enteró. “Cuando se corrió la voz por la ciudad de que, aparentemente, Tom Holland era el camarero del bar, el gerente se dio cuenta y finalmente, me echó”, relató . “He regresado al bar, aunque ahora mismo la situación con ellos es un poco complicada. Sin embargo, les he dado mucha prensa. Así que se han callado y me han dejado volver”.
Zendaya y Tom Holland forman, sin dudas, la pareja del momento. En una reciente entrevista para promocionar la película dirigida por Ruben Fleischer, el actor confesó una insólita situación que vivió con su novia en torno a su último proyecto cinematográfico.
Orgulloso de su trabajo en “Uncharted”, intentó explicarle a su novia de qué trataba la producción pero no pudo terminar de hablar. “Hubo un momento divertido en el set de ‘Spider-Man: No Way Home’, porque filmamos eso justo después de terminar con ‘Uncharted’. Estaba sentado con Zendaya tratando de explicarle de qué se trataba, y contándole que hay una escena en la que ‘me atropella un vehículo que se cae de un avión’; y ella respondió: ¿Qué? ¿Cómo diablos sucede eso? Esta película suena ridícula’”.
Lo cierto es que el filme, que costó USD 120 millones, está siendo un autentico éxito y ya recaudó más USD 50 millones en su primer fin de semana en los cines. Apenas tres meses después del debut de “Spider-Man: No Way Home”, uno de los mejores estrenos en la historia de los Estados Unidos, su protagonista, Tom Holland, volvió a liderar la taquilla.
Un retiro temporal y un futuro incierto en Hollywood
Siete años trabajando sin parar y soportando la presión de ser el hombre más taquillero del momento por “Uncharted” y “Spider-Man: No Way Home”, seguramente influyeron en la decisión del actor de retirarse temporalmente de los sets de rodaje.
Tras la campaña de promoción mundial de “Uncharted”, el británico ha decidido filmar “The Crowded Room”, una serie limitada para Apple TV+ junto a Amanda Seyfried, para después tomarse un merecido descanso y, lo más importante, para replantearse su vida.
“Voy a filmar una serie para Apple+ y estoy muy entusiasmado. Pero puedo decir con total seguridad que, después de terminar esa serie, me tomaré un descanso”, aseguró el actor de 25 años en una entrevista con CinePop, dejando a todos sus fans impactados.
Tom, que desde 2015 estrena una película tras otra, quiere volver a casa para compartir más momentos con su familia y amigos, pero sobre todo para estar más tiempo con su novia Zendaya con quien, dicen, pronto se mudará a una casa que compraron en Londres.
Pero las inesperadas declaraciones del actor, en la cúspide de su carrera, no terminan aquí.
Pocos días atrás, sorprendió a todos cuando confesó: “Ni siquiera sé si quiero ser actor. Empecé a actuar cuando tenía 11 años y no he hecho nada más, así que me gustaría hacer otras cosas. Sinceramente, estoy como teniendo una crisis previa a la mediana edad”.
Pese a ello, muy pocos dudan de que cuando llegue el momento allí estará de nuevo, preparado para enfundarse el traje en “Spider-Man 4″. En su futura agenda, el actor también tiene otro gran papel en camino: la película biográfica sobre Fred Astaire, en la que podrá exhibir sus dotes como bailarín y que podría marcar el comienzo de una nueva dirección en su carrera que lo regresaría a sus dos grandes pasiones: la danza y el teatro.
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