Michael Lang, uno de los organizadores del mítico Festival de Woodstock en 1969, murió ayer a los 77 años en el hospital Sloan Kettering de Nueva York a raíz de un linfoma de Hodgkin, informó un allegado suyo al sitio especializado The Hollywood Reporter.
Nacido en Brooklyn, Lang comenzó a producir grandes conciertos a finales de los ‘60 hasta finalmente asociarse con Joel Rosenman y John Roberts para planificar el famoso encuentro musical de tres días que marcó un hito en la contracultura de la época.
”Woodstock ofreció un entorno para que las personas se expresaran mejor. Probablemente fue el evento más pacífico de su tipo en la historia. Eso se debió a las expectativas y a lo que la gente quería crear allí”, había manifestado en una entrevista ofrecida en 2019, cuando se cumplieron 50 años del festival.
Actos que van desde Joan Baez and the Grateful Dead hasta Creedence Clearwater Revival y Jimi Hendrix se presentaron en el festival en el norte del estado de Nueva York. La asombrosa alineación de 32 actos también incluyó a The Who, Janis Joplin, Sly And The Family Stone, Ravi Shankar y Jefferson Airplane.
El productor había revelado en pasadas entrevistas que el evento se inspiró en los “sonidos de los sábados” que “tuvieron lugar en una pequeña granja a las afueras de Woodstock” y fueron “lo mejor que había experimentado musicalmente”. “Quiero decir, estar en una granja bajo las estrellas, un entorno bucólico, escuchar música increíble”, explicaba.
Lang también produjo las reediciones de 1994 y 1999 , y trabajó en la organización del encuentro que en 1999 iba a celebrar los 50 años, que finalmente fue suspendido.
Sin embargo, la actividad de este productor no se concentró solamente en la marca Woodstock, debido a que trabajó con diversos artistas de primera línea.
Fue mánager de Joe Cocker -una de las revelaciones de Woodstock- a quien incluso acompañó a Buenos Aires cuando en los ‘70 el cantante se presentó en nuestro país. También trabajó con Prince, Snoop Dogg, Steely Dan, The Fugees, Shakira, Madonna, Norah Jones, Marc Anthony, Bruce Springsteen, Red Hot Chili Peppers y Christina Aguilera, por citar apenas algunos.
En el documental de 2019 Woodstock: 3 Days That Changed Everything, Michael explicó que tenía una “visión diferente” de los festivales más turbulentos de la época.
“Y nuestra visión era crear un ambiente muy positivo, muy reconfortante para la audiencia, no presentar la confrontación de ninguna manera”, dijo.
Max y sus compañeros promotores prepararon baños y otros servicios similares para “una multitud de 200.000 personas”, solo para enfrentarse a una audiencia de más del doble de ese tamaño.
“Las estimaciones son de medio millón a 600.000 en el sitio, un millón y medio en la carretera tratando de llegar allí”, dijo en una entrevista. “Cerraron la autopista, cerraron la frontera canadiense, cerraron todo lo que pudieron cerrar, ya sabes, afortunadamente, francamente, porque no sé qué habríamos hecho con más gente”.
Las actuaciones se programaron durante toda la noche y hasta la mañana a lo largo de tres días, y las drogas abundaron tanto entre el público como entre los músicos.
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