La familia de Joan Sebastian, así como él mismo, se ha visto involucrada en rumores sobre el narcotráfico desde años atrás, y aunque el llamado Rey del Jaripeo ya no existe físicamente, los Figueroa siguen temiendo por su seguridad tras los ataques que ya han sufrido.
Fede Figueroa, sobrino de Joan Sebastian e hijo de Federico Figueroa, es un joven de 27 años que desde muy pequeño ha buscado seguir la carrera artística de su tío, por lo que hoy ya es un reconocido cantante; sin embargo, con la fama también han llegado las peligrosas contrapartes, como lo es la inseguridad.
En entrevista con De Primera Mano, el cantante habló de cómo se protege frente a los posibles ataques que pueda sufrir, como los que ha tenido que afrontar gran parte de la familia Figueroa.
“Traemos la gente de seguridad que es suficiente, creemos nosotros. Yo soy muy de creer en Dios; me persigno y ahora sí que a nosotros a hacer nuestro trabajo, y hasta ahí. No nos queda más que ponernos en manos de Dios, la verdad”, confesó Fede.
Y es que Joan Sebastian se vio vinculado con el narco desde 2004, cuando Marco Enrique Yépez Uribe, El Jarocho, presunto integrante del cártel Juárez, arrojó el nombre del cantante cuando fue detenido. Él aseguró que el rancho del Poeta del Pueblo en Juliantla era utilizado para esconder sustancias ilícitas.
Desde entonces, el intérprete de Tatuajes se vio envuelto en varias controversias que lo pusieron en el ojo del huracán.
Fue dos años después, en 2006, cuando Trigo de Jesús Figueroa, hijo del cantante, fue asesinado durante un concierto.
Joan Sebastian estaba ofreciendo un show en Estados Unidos cuando un grupo de seguidores se acercó a él con el fin de obtener un autógrafo. El cantante, al ver el estado de embriaguez en el que se encontraba, prefirió negarse.
Esta respuesta molestó a sus fanáticos, quienes dispararon al suelo. La reacción de Trigo fue correr del lugar, pues era el encargado de seguridad de su papá. Al joven lo alcanzaron y le dispararon, causando su muerte.
Pese a que esta es la versión que la familia y autoridades siempre han dado a la muerte de Trigo, hay quienes aseguran que se trató de un ajuste de cuentas debido a la polémica anterior.
Ahí no terminaron los ataques hacia los Figueroa, pues en 2010 otro de los hijos mayores también fue asesinado. Juan Sebastián Figueroa fue atacado con balazos al salir del bar The Gran Hotel en Cuernavaca, Morelos, luego de haber disfrutado de una noche de copas. Cuando se dio a conocer el asesinato, rápidamente comenzó a circular el rumor de que el crimen había sido cometido por integrantes del Cártel del Pacífico Sur.
El mismo Joan desmintió los rumores en una conferencia de prensa, en donde, enojado, mencionó que no se trataba de un ajuste de cuentas y agregó: “Si el ejército vino se pudo dar cuenta de que traigo 500 hombres armados. Traigo 500 hombres o más armados con picos, palas, machetes; traigo hombres armados con martillo y cincel picando piedra, labrando un sueño”.
El Poeta del Pueblo y sus hijos no son los únicos que se han visto atacados, sino que su hermano Federico Figueroa, padre del joven cantante, también ha sido señalado por narcomantas junto a Mario Casarrubias y Noé Reynoso en Morelos. Los tres estaban siendo acusado por la violencia en dicho estado.
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