Pedro Infante fue de esas celebridades de la Época de Oro del cine mexicano que pocas veces se dejaron ver sin bigote, pues inclusive se convirtió en una de sus características. Sin embargo, al principio de su carrera lució un rostro juvenil y con poco vello facial.
Como la mayoría de los artistas mexicanos que buscaban resaltar su masculinidad con un bigote, Pedro Infante mantuvo el suyo durante la mayor parte de su carrera artística, pues no sólo le permitía presentar la imagen del típico sinaloense, sino que favorecía a su cara.
El bigote también hacía ver al actor como una persona mayor, pues cuando se rasuraba se quitaba años de encima, algo que no buscaba cuando comenzó a obtener papeles de hombre seductor y mexicano que imponía autoridad a donde quiera que fuera.
Sin embargo, al principio de su carrera, Infante no tenía la intención de ser un gran actor, por lo que su bigote no era algo de importancia en su imagen. Y es que antes de convertirse en el histrión más importante del cine mexicano, Pedro Infante pretendía ser una gran músico y cantante.
Sus intenciones eran las de seguir los pasos de su padre, Don Delfino, quien era un reconocido músico en Sinaloa, en donde tocaba diversos instrumentos acompañados de su orquesta. El Ídolo del Pueblo, quien creció viendo cómo su papá era un apasionado de la música, también quería vivir ese sueño.
Cuando llegó a la Ciudad de México, a los 22 años, el joven Pedro podía tener una semana su bigote y otra no, era algo que le daba igual, pues quizás sí tenía que cuidar su imagen cuando se trataba de estar en el escenario, pero no necesitaba respetar una idea de sí mismo.
En diferentes fotografías en las que se muestra al sinaloense joven, mientras trabajaba en radiodifusoras, se puede apreciar cómo no llevaba su bigote. Incluso, en las primeras películas en las que participó, teniendo papeles de cantante, tampoco lo utilizaba.
Puedes irte de mí es una película que se filmó cuando el Ídolo de Guamúchil tan solo tenía 23 años, y en la que hace poco se descubrió que Pedro aparecía. En esta cinta un casi desconocido Infante canta con una orquesta del típico estilo de Hollywood. En 2009 fue que se descubrió su aparición cantando la canción principal del filme, Puedes irte de mí, de Agustín Lara.
En esta producción, el protagonista de Tizoc todavía no utilizaba bigote, lo mismo sucede en La Feria de las Flores, en donde tiene más participación. En esta película el sinaloense ya tenía 25 años y era su segundo trabajo en donde se encontraba en los créditos.
Este filme es la primera producción en donde Pedro obtuvo un papel protagónico, pese a que su personaje no es el estelar.
Llamó tanto la atención del público en La Feria de las Flores gracias a su voz, que su siguiente película se convirtió en la primera en donde fue el persona principal, sin embargo, para esa ocasión, ya necesitaba usar bigote.
Jesusita en Chihuahua y La razón de la culpa fueron las dos películas con las que inició una exitosa vida como actor, obteniendo solamente papeles protagónicos.
Desde sus 26 años, el intérprete de Amorcito Corazón ya no podía quitarse el bigote, pues con ello arriesgaría su carrera, pues siempre favoreció a su rostro y lo impuso como una de sus características. El Ídolo Inmortal, ni las veces en que tuvo que modificar un poco su imagen, quiso quitarse su mostacho.
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