Tom Cruise es un actor tan famoso por sus memorables papeles en la pantalla grande, como por sus excentricidades por fuera de ella, y estas navidades volvió a llegar a los titulares por cuenta de una extraña y curiosa tradición personal que lleva a cabo cada diciembre y que este año involucró a un periodista inglés.
Resulta que cada Navidad, Cruise envía tortas de coco y chocolate blanco de $50 dólares a sus amigos más cercanos. Kirsten Dunst, Henry Cavill, Angela Bassett, Jimmy Fallon, Graham Norton y muchas otras figuras de alto perfil reciben un pastel, elaborado con cariño por Doan’s Bakery en California y enviado por el personal de Cruise. Pero desde hace un año Stuart Heritage un periodista de The Guardian se embarcó en una campaña para recibir él también uno de estos exclusivos regalos.
Todo comenzó cuando Heritage escribió una nota el año pasado sobre la peculiar tradición de Cruise.
En ella contó que esta tradición empezó cuando Cruise se encontró por primera vez con el pastel gracias a una competencia entre Diane Keaton y Katie Holmes tuvieron para encontrar el mejor pastel. Cruise probó la oferta de Keaton y se transformó de inmediato. “Este pastel milagroso hay que compartirlo”, pensó, y pasó varios años enviando cientos de ellos a personajes famosos de todo el mundo.
Para ese entonces Cruise y Holmes estaban casados y aunque su historia de amor terminó en un triste divorcio el pastel sobrevivió, y también la tradición. Según la propia Diane Keaton, todos los años recibe un pastel de Cruise, al punto que su familia lo ha apodado The Cruise Cake (El pastel Cruise).
Recientemente el actor, que está embarcado en un intenso rodaje de tres nuevas entregas de la saga de Misión Imposible, le regaló pasteles a todo el elenco de las películas los cuales hizo traer en su jet privado. Un medio de domicilio que Heritage cree, o quiere creer, también fue usado para entregarle su pastel.
“Para Stuart Heritage, mis mejores deseos para ti en esta temporada navideña, Tom Cruise”, dice el mensaje que llegó en la caja y que fue compartido por el periodista británico.
“Al principio, dudé en abrir la caja, porque la respuesta racional a un comportamiento tan desagradable como el mío habría sido poner un pastel de natillas con resorte adentro, tal vez uno rociado con ántrax. Pero luego el olor me golpeó. Oh Dios, el maravilloso olor”, describe Stuart en un blog donde contó sobre su regalo.
Stuart describió el pastel como “realmente delicioso” y con una esponja “perfectamente liviana y húmeda”, algo que lo sorprendió pues para llegar a sus manos el postre tuvo que viajar varias horas y kilómetros.
“Esta es una cosa suave, sedosa y lujosa, tan increíblemente rica que casi desafía cualquier descripción. ¿Es el mejor pastel que he comido? Muy posiblemente. Y mírame, por el amor de Dios. Claramente conozco mi camino alrededor de un pastel”, escribe Heritage.
Recuerda el periodista que en su campaña para obtener el codiciado postre recurrentemente escribió a Cruise por redes sociales, bromeando y molestando con que no sería capaz de enviarle un pastel.
En una de esas publicaciones, cuando Cruise fue noticia por comer dos curry idénticos seguidos en Birmingham, le escribió: “Si tuvieras valor, me enviarías dos”.
Y bueno, parece que funcionó porque efectivamente el periodista recibió sus dos pasteles. “Uno al lado del otro, entregado al mismo tiempo, como un baller”, dijo.
Con este regalo Heritage se convirtió en uno más de la lista de afortunados que recibe de Tom Cruise un poco de espíritu navideño cada diciembre, una lista que según los famosos que la integran se vuelve una tradición. Veremos cuánto dura este periodista en ella.
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