Aunque hace algunos meses se especuló en los medios de información que Lyn May y Carmen Salinas estaban distanciadas desde hace tiempo por razones no conocidas, esto luego de que la vedette acapulqueña aseguró que la fallecida Corcholata del cine de ficheras le había hecho desplantes porque prefería “juntarse con políticos y gente importante”.
Poco antes de perder la vida, quien también fuera empresaria, productora teatral y diputada federal, fue “visitada” por Lyn, quien acudió al hospital StarMédica de la colonia Roma, en la Ciudad de México, en un intento por ver a la actriz, quien entonces se encontraba en estado de coma natural.
La guardia del centro hospitalario no le permitió a la vedette de ascendencia china ingresar a la zona de cuidados intensivos, tras lo cual Lyn recibió una ola de críticas por acudir al lugar, especialmente porque iba ataviada con un ajustado vestido de lentejuelas y maquillaje cargado. Esto fue interpretado como un irrespeto para la delicada situación en que se encontraba la hoy fallecida actriz de 82 años.
Ahora, tras haber llorado la muerte de la también imitadora y cantante, ocurrida el pasado 9 de diciembre, Lyn May aseguró seguir devastada. Así lo dijo en un enlace virtual para el programa De primera mano.
“Yo no quiero pensar que Carmelita se fue porque me duele muchísimo, fueron años, aquí están mis hijas conmigo ahorita que también convivieron con ella, yo siento, y no quiero hablar porque se me salen las lágrimas, pero para mí pienso que está en televisión trabajando, para mí es una persona muy especial, porque vivimos en su casa, porque nos veíamos todos los días, cuando murió Pedrito yo me quedaba con ella acompañándola, porque en esa época nadie la iba a visitar en las noches y yo me la pasaba con ella”, recordó la bailarina exótica, a quien hemos visto recientemente en el concurso Quiero cantar del matutino Venga la alegría.
Sobre el fallecimiento a los 37 años del músico Pedro Plascencia, afectado por un agresivo cáncer -suceso que marcó la vida de Carmen Salinas- Lyn recordó que fue ella quien fungió como el paño de lágrimas de quien consideraba “su hermana”.
“Fue lo que más le ha dolido a Carmen, era su brazo derecho, la acompañaba, le hacía los arreglos, estaba siempre con ella todo el tiempo. Cuando le dieron la noticia ahí en el hospital, me abrazó llorando, salió Pedrito después diciendo ‘tía tengo esto’, y de ahí, desde que mis hijas eran chiquitas estuvimos ahí juntas”, recordó la vedette que tuvo un “segundo aire” a partir del documental estrenado en 2016, Bellas de noche, producción de María José Cuevas que retrata el deceso de bailarinas de la época junto a Olga Breeskin, la fallecida Wanda Seux, Rossy Mendoza y Princesa Yamal.
Para dejar en claro que nunca tuvo algún tipo de rencilla o resentimientos hacia Carmen, Lyn aseguró que no tiene “recuerdos feos” de la productora de Aventurera, por el contrario destacó su nobleza y carácter humanitario. Esto concuerda con los testimonios surgidos tras la muerte de Salinas, de múltiples famosos e integrantes de la prensa que aseguran haber recibido siempre ayuda por parte de la entrañable actriz.
“Me quedo con una hermana que adoraba, el recuerdo que trabajamos muchísimos años juntas, con la señora la amiga que fue, con puros recuerdos bonitos, no tengo recuerdos feos de Carmen, nunca tuve nada malo, siempre fuimos grandes hermanas, grandes amigas, mis hijas y sus hijos, y me quedo con todo lo bueno de ella, siempre fue buena persona, siempre ayudó a todo mundo, no me queda un recuerdo malo”, finalizó.
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