Luis Gerardo Méndez fue parte de la tercera temporada de Narcos: México, la serie de Netflix que retrata varias décadas del contexto político de dicho territorio y habla sobre algunos de los narcotraficantes y bandas delictivas más conocidas del país.
En la más reciente entrega el actor fungió como un policía fronterizo que, tras varias incógnitas, comienza a investigar los feminicidios en Ciudad Juárez que acontecieron en los años noventa. No obstante, uno de sus mayores retos fue conseguir el peso que requería el personaje.
“Sabía que quería ayuda profesional para ganar peso. No estaba buscando destruir mi cuerpo y hablé con un par de nutricionistas y entrenadores para obtener primero la mayor cantidad de información posible”, narró el actor para Men’s Journal.
Así, el mexicano, quien estuvo a punto de no obtener el papel debido a su aspecto delgado, comenzó todo un proceso para tener una barriga prominente.
“Luego comencé a comer alrededor de 7,000 u 8,000 calorías al día, un poco más de las 2,000 habituales. Fue mucha comida. Al principio es divertido comer todo este helado, pasta y pizza. Pero después de cuatro días, te supera. Comía mucho más de lo que solía comer. También estaba bebiendo estos batidos de 2,000 calorías entre comidas”, mencionó.
Cuando aceptó participar en la serie, Méndez creyó que sólo tendría que mantenerse con ese aspecto durante poco tiempo, sin embargo, la contingencia sanitaria por COVID-19 que paralizó al mundo, también lo colocó en una situación bastante complicada.
“Cuando me inscribí pensé que solo tendría que seguir así durante seis meses. Pero luego sucedió la pandemia y terminó siendo un año y medio. Estaba encerrado en Tulum, comiendo todo lo que pude. Por lo general, me cuido bien, así que fue una experiencia realmente interesante y desafiante: ver lo que ese tipo de peso y comer constantemente pueden hacerle a tu psique”, expresó el artista.
Asimismo, señaló que el peso era algo importante para la representación del papel, ya que, durante la serie, el policía que representó tiene un difícil proceso que está ligado a una cruda realidad a la que se enfrenta día con día, mientras intenta encontrar a una joven que trabajaba en una de las maquilas del estado.
“En cuanto a mi personaje, quería asegurarme de poder representar el peso del alma. Todas las noches este tipo sale a un mundo peligroso con toda esta presión económica sobre él”, expresó.
Me sometí a un programa de entrenamiento bastante serio porque se trataba de ganar tanta masa como fuera posible. Este policía no es solo un vago. Es un tipo duro que también es capaz de manejarse a sí mismo y tiene algunos kilos más para hacer el trabajo.
Luis Gerardo recordó su participación en el filme Bayoneta donde interpretó a un boxeador que tenía un físico sumamente atlético.
“Hace unos años, hice una película de boxeo en la que realmente aprendí a lanzar un buen puñetazo. Esta vez lo estaba haciendo con un tipo de cuerpo diferente, así que tenía que hacer algunos ajustes”, dijo.
Además de los feminicidios en Ciudad Juárez, la tercer temporada de Narcos: México cuenta la historia de los “Narcojuniors”, mientras intenta mostrar lo que hubo detrás de una ola de violencia que continúa. refleja diversas problemáticascomo la violencia contra los periodistas y la lucha entre los cárteles de Tijuana y Sinaloa.
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