En la madrugada de este jueves, la actriz mexicana, Carmelita Salinas, ingresó de emergencia a un hospital en la colonia Roma Sur, en la Ciudad de México, luego de que sufrió un derrame cerebral.
A través del matutino de Televisa, Hoy, la familia de Carmelita, de 82 años, confirmó que la actriz sufrió un derrame cerebral en la noche del 10 de octubre.
De acuerdo con lo narrado por los familiares, la actriz fue hallada sin consciencia por el personal de limpieza de su hogar. Hasta ese momento, no había presentado malestares. Posteriormente, la llevaron al hospital, en donde permanece en coma de manera natural. Al momento, permanece con respiración asistida.
“La familia Salinas les comparte que la primera actiz, la Sa. Carmen Salinas, atraviesa por una difícil situación de salid, razón por la cual permanece en el área de terapia intesiva, donde médicos la atienden. Por el respeto y cariño que mi tía expresa a la prensa, se les mantendrá informados sobre el estado de salud y evolución”, se lee en un comunicado firmado por Gustavo y difundido en los medios de comunicación.
Un derrame cerebral es una lesión en el cerebro ocasionada por la interrupción o reducción del flujo en la sangre: “Es una alteración neurológica que se caracteriza por aparición brusca, con síntomas de 24 horas o más, causando secuelas y, en algunos casos, muerte”, define el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Existen tres tipos de Enfermedad Vascular Cerebral (EVC), como se le conoce clínicamente al padecimiento: tombótico, embólico y hemorrágico. Siendo este último el que se conoce coloquialmente como “derrame cerebral”.
En el primero, el flujo de sangre de una arteria cerebral se bloquea debido a un coágulo que se forma dentro de la misma. Esto es comunmente ocasionado por una ateroesclerosis, que es cuando la acumulación de depósitos grasosos causan un estrechamiento de los vasos sanguíneos.
El embólico ocure cuando el coágulo se origina en una parte ajena al cerebro, como en el corazón. En este caso, un coágulo se desprende y es arrastrado por la corriente sanguínea hacia el cerebro. Llega a un punto que es lo suficientemente estrecho y, al no poder pasar, tapa el vaso sanguíneo y bloquea el abastecimiento de sangre. Este bloqueo súbito adquiere el nombre clínico de “embolia”.
El último tipo de EVC es el hemorrágico, conocido como “derrame cerebral”, y es causado por la ruptura y sangrado de un vaso sanguíneo en el cerebro.
De acuerdo con información del Insituto Nacional de Neurología y Neurocirugía “Manuel Velasco Suáres”, la Enfermedad Vascular Cerebral es una de las primeras causas de muerte en el país.
Algunos signos de alarma son el entumecimiento, debilidad o parálisis en la cara, el brazo o la pierna, en uno o ambos lados del cuerpo y que aparece de forma repentina. También la ocurrencia súbita de visión borrosa o de reducción de la visión, pérdida del equilibrio o caídas sin expliaciones.
También lo son la incapacidad repentina de comunicarse, ya sea por dificultad de hablar o entender y la aparición súbita de dolor de cabeza de gran intensidad y sin causa conocida.
Es importante enfatizar que cualquiera de los signos de alarma pueden durar solo unos minutos y luego desaparecer o pueden indicar un EVC de mayores consecuencias y requieren atención médica inmediata. Para más información, el IMSS pone a disposición material informativo sobre la Enfermedad Enfermedad Cerebral en su página web.
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