Alec Baldwin se dirigió a un enjambre de fotógrafos el sábado que lo esperaban en Manchester, un conocido resort en Vermont donde él y su familia se refugian desde el incidente en el que mató accidentalmente con un arma a su compañera de la película “Rust”, la directora de fotografía Halyna Hutchins.
Conmocionado por las consultas, el actor se enfrentó a las cámaras de Fox News acompañado de su su mujer, Hilaria.
“Era mi amiga, mi amiga”, dijo visiblemente conmovido. “El día que comenzamos el rodaje la llevé a cenar con el director, era mi amiga”, repitió varias veces con al intención de que no le pregntaran más.
En medio de la declaración su esposa intervino en la entrevista. Muy enojada, increpó a los periodistas pero Baldwin rápidamente le pidió que se calmara que él iba a contestar.
El actor calificó el episodio como “horrible” y caracterizó al equipo como “bien aceitado”, señalando que el accidente es obviamente impactante y devastador para él.
El actor, que varias veces dijo que no podría hablar del episodio porque la investigación está en curso, sí se explayó sobre la importancia de mejorar los protocolos y las medidas de seguridad.
“Hay accidentes, de vez en cuando, en los sets pero nada como esto. Este es un episodio en un billón, uno en un billón”, afirmó. “Cuántas balas fueron disparadas en shows de TV y cine en los últimos 5-7 años, esto es EEUU… Cuántas. Y casi todas sin incidentes. Entonces, lo que ahora debe suceder es que, cuando algo sí sale mal, como en este episodio horrible y catastrófico, hay que tomar medidas… Armas de utilería, de plástico...”, analizó.
A medida que la charla avanzaba, el actor dejó al postura reticente del principio e intentó tener una charla en buenos términos.
“Nos detuvimos por cortesía pero, por favor, vayan a casa”, pidió. “Mis hijos están llorando en el auto, saben que nos están siguiendo”, imploró.
Hasta ahora, Baldwin sólo había hablado de la tragedia a través de su cuenta de Twitter. Esta declaración es la primera que hace en persona.
“No hay palabras para transmitir mi conmoción y tristeza por el trágico accidente que se llevó la vida de Halyna Hutchins, una esposa, madre y colega nuestra profundamente admirada. Estoy cooperando plenamente con la investigación policial para abordar cómo ocurrió esta tragedia”, había escrito en su cuenta de Twitter tras la tragedia. En ese momento añadió: “Estoy en contacto con su marido, ofreciéndole mi apoyo a él y a su familia. Mi corazón está roto por su marido, su hijo y todos los que conocían y querían a Halyna”.
Luego, se difundieron en los medios norteamericanos imágenes del actor acompañando a la familia de la fallecida directora de fotografía.
Las pesquisas por el dramático episodio en el que el actor mató accidentalmente a Hutchins y baleó al director Joel Souza se centran, hasta ahora, en buscar una explicación clave: por qué había munición real en el plató de la película.
Ahora, el FBI analiza la última evidencia recabada en el camión de utilería del set. Allí, se guardaban todas las armas para el rodaje y se encontraron bolsas negras con “cartucho de fogueo LC gastado” y también un “cartucho para 45 Colt”.
Baldwin empuñaba un revólver Colt del calibre 45 cuando disparó mortalmente a Hutchins e hirió a Souza, el jueves 21 de octubre.
También había bolsas y cajas de cartón llenas de “munición diversa”, según el documento presentado ayer en el Tribunal de Primera Instancia del Condado de Santa Fe. Junto con la munición, los agentes incautaron de 12 revólveres y un rifle, según el documento, sin detallar exactamente qué tipo de armas eran.
En los expedientes del caso figura que la jefa de armas, Hannah Gutiérrez-Reed -hoy en el foco de las investigaciones-, declaró que las armas de la película permanecían “aseguradas dentro de una caja fuerte en un camión de utilería en el set”. Ella advirtió que sólo unas pocas personas tenían acceso a la combinación de la caja fuerte.
Sin embargo, en la última lista de artículos incautados no figura la existencia de una caja fuerte. Sí aparecen rotuladas armas y la munición, pero no si estaban en una caja fuerte.
En sus entrevistas previas, Gutiérrez-Reed había afirmado que “nunca se guardaba munición real en el plató”, pero el sheriff del condado de Santa Fe, Adán Mendoza, descubrió que eso no era cierto. De hecho, los 500 cartuchos de munición incautados en el plató son, según el propio sheriff, “una mezcla de balas de fogueo, cartuchos ficticios y cartuchos reales”.
A estas alturas de la investigación, las autoridades de Santa Fe no se atreven a dar conclusiones y barajan todos los escenarios posibles, incluida la imputación de alguno de los implicados en el rodaje. Nadie ha sido acusado por el tiroteo, sin embargo la fiscal del distrito de Santa Fe, Mary Carmack-Altwies, dijo el miércoles pasado que “no se ha descartado a nadie en este momento... Todas las opciones están sobre la mesa”.
En desarrollo...
SEGUIR LEYENDO: