Cuando se dio a conocer el fallecimiento de Mac Miller en el mes de septiembre de 2018, se empezó a especular y surgieron teorías de su muerte y poco después tres hombres identificados como Cameron Pettit, Ryan Reavis y Stephen Walter fueron acusados por la sobredosis del rapero, pero fue hasta este año que uno de ellos aceptó declararse culpable por su muerte.
De acuerdo con el medio TMZ, Stephen Walker se declaró culpable el pasado 25 de octubre ante los fiscales, bajo el cargo de venta de píldoras de oxicodona alteradas con fentanilo, pero también se indicaba que se retiraban otras acusaciones como: “Conspiración para distribuir una sustancia controlada”.
El dealer de 46 años enfrentará su próximo juicio el día 16 de noviembre de este año, fecha en la que el acusado se declararía culpable formalmente, por lo que se espera que el caso concluya y la muerte del rapero tenga un cierre.
Si Walter asume la culpabilidad, se salvaría de un largo juicio, además de no recibir la sentencia máxima en Estados Unidos, la cual consiste en 20 años de prisión, libertad condicional de por vida y 1 millón de dólares de multa, pero al ser responsable del fallecimiento del rapero tendría que cumplir con 17 años de prisión y 5 años de libertad condicional.
También se sabe que Stephen Walter no era quien se las vendía directamente, pues en las investigaciones, se descubrió que el dealer fue quien dio la orden a Cameron Pettit de entregar las píldoras que contenían una alta dosis de fentalino.
En el mes de septiembre de 2019, un año después de la muerte de Malcolm James McCormick, el nombre real del rapero, la oficina del forense del condado de Los Ángeles compartió los resultados toxicológicos y según el informe, Miller murió por “toxicidad de drogas mixtas”, específicamente por la ingesta de fentanilo, cocaína y también alcohol. Su muerte fue calificada como sobredosis accidental.
También se reveló en los reportes policiales que el músico y productor fue encontrado sin vida por uno de sus asistentes, quien lo halló en una “posición de rezo”, arrodillado, agachado y con su cabeza reposando cerca de sus rodillas y con la nariz ensangrentada. Además, se encontró una botella vacía de alcohol en el lugar y un frasco de pastillas en el baño. En su pantalón había un billete enrollado de 20 dólares con residuos de polvo blanco.
El rapero luchó contra su adicción a diversas sustancias durante años y es lo que provocó que terminara su relación con Ariana Grande, con quien llevaba poco más de dos años juntos. Pocos días después de la muerte de su ex, la cantante terminó su relación con el cómico del programa Saturday Night Live, Pete Davidson.
En el mismo mes, su fortuna había sido contada y dividida entre sus amigos y familiares cercanos. El valor neto total estimado ascendió a aproximadamente USD 11,3 millones de acuerdo con los documentos de patrimonio que incluían valores de propiedad y efectivo real, informó TMZ, que obtuvo en exclusiva los documentos legales.
Sus padres y su hermano, Miller McCormick, se quedaron con la mayor parte del dinero y objetos personales del músico, aunque sus amigos más cercanos también estaban incluidos en su testamento para recibir parte de las pertenencias personales de la estrella.
Las instrucciones que dejó Miller antes de fallecer fueron bastante específicas: para Bryan Johnson le dejó en su posesión todos sus televisores, su computadora y sus iPads. A otro de sus amigos, Q Chandler-Cuff, le heredó todas las joyas que están valoradas en “varias decenas de miles de dólares”. Por su parte, Dylan Reynolds recibió todos los instrumentos y equipos, incluida su guitarra valuada en 5 mil dólares Y finalmente su último amigo Jimmy Murton se quedó con sus muebles. Se estima que le dejó a su familia un aproximado de 5 millones de dólares, divididos entre su cuenta bancaria y otros artículos que no puso en su fideicomiso.
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