Durante la noche del sábado pasado murió el director de cine mexicano Felipe Cazals, el cual fue ampliamente reconocido por la crudeza de sus películas. Sino lo conoces, a continuación te decimos cuáles de sus películas que no debes perderte.
Antes que nada, es importante señalar que el auge de el también productor y guionista se dio en los años setenta, donde estuvo a cargo de tres filmes que marcarían no sólo su trayectoria, sino el cine nacional.
Canoa: memoria de un hecho vergonzoso (1976)
Un pueblo llamado San Miguel Canoa con personas enardecidas por la religión podría ser una primicia de esta cinta.
De la trama sin spoilers podría decirse un poco: 5 jóvenes que que deciden ir a escalar el volcán La Malinche y que ven truncada su aventura debido al mal tiempo se enfrentarán a una terrible masacre después de refugiarse en el citado pueblo y ser confundidos con comunistas.
Así, durante la película de casi dos horas, el espectador no puede dejar de mirar la pantalla ante la crudeza de los sentimientos y acciones que ejecutan los personajes.
El apando (1976)
Inspirada en una de las obras literarias más representativas de José Revueltas, Felipe Cazals se remitió al “apando” un lugar enclaustrado dentro de una prisión. Podría decirse que era una cárcel dentro de la misma prisión.
De los protagonistas se habla de tres: Polonio, Albino y “El Carajo”, quienes tienen una adicción a las drogas y formulan un plan para que la madre de este último recluso ingrese sustancias al penal mientras los transporta en sus genitales.
Entre la abstención de drogas, el encierro, los golpes hasta protestas, las escenas de esta película se vuelven una cruda representación del sistema penitenciario y de una sociedad corrompida y sin salvación.
Las Poquianchis (1976)
Tres hermanas, posiblemente las más famosas de México, son las protagonistas de esta cinta, la cual está basada en el caso de las González Valenzuela quienes tenían una red de prostitución y estaban protegidas por las autoridades locales.
Muertes, abuso y varias historias de despojo y más maltrato son lo que envuelven la narrativa de esta película. La condena y el destino al que tuvieron que enfrentarse estas hermanas sólo se dio después de un escabroso descubrimiento.
Por todo lo anterior, Felipe Cazals se consolidó como uno de los mejores cineastas que ha tenido el país y su talento no paró ahí, sino que fue acreedor de varios premios Ariel en categorías como: Mejor película, mejor dirección y mejor largometraje documental.
Apenas en agosto de este año, Felipe Cazals tuvo una entrevista con Cine Premier y habló sobre como vivía él su arte.
“El cine se siente y luego se reflexiona. Así lo creo yo, así lo he concebido en mis películas. Yo creo fundamentalmente en que es aquí en el sentir del espectador donde está la atención y el interés. Aunque obviamente la narrativa debe tener una coherencia y una solidez absoluta idealmente”, dijo en aquel entonces.
De acuerdo con el guionista, el cine mexicano es sólido, pues muchos de los directores del país se vieron en serias dificultades al no poder grabar de la forma en la que querían.
“Hubo muchos que nunca pudieron más que obedecer las instrucciones de un productor para poder sobrevivir. Y, sin embargo [...] se muestra un México tan cerca de aquel tiempo y que está totalmente ignorado”, dijo.
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