Esta semana la polémica se hizo presente en una de las parejas más sólidas dentro de la farándula mexicana: Andrea Legarreta y Erik Rubín. La filtración de unas fotos de una supuesta infidelidad incomodaron a más de uno, pero no a los involucrados, aunque sí existió una poderosa razón en ellos para aclarar la situación que cuestionó la forma en la que conducen su matrimonio desde hace más de 20 años.
A inicios de esta semana se viralizaron las polémicas imágenes: el ex integrante de Timbiriche disfrutaba de una noche de diversión al lado de una guapa joven en Cancún, Quintana Roo, en la que la conductora de Hoy brilló por su ausencia.
En cuestión de horas, las capturas corrieron como reguero de pólvora por las redes sociales y para muchos significaron un posible quiebre al interior de una de las parejas más queridas en la industria del entretenimiento mexicano, y es que han sabido sortear los embates de la industria, las críticas, abortos y hasta los conflictos derivados del tiempo.
Para acabar con el escándalo, tanto Andrea como Erik dieron la cara y explicaron qué es lo que pasó aquella noche y de paso dieron una cátedra de cómo han logrado mantenerse unidos en una relación cimentada en el amor de pareja y al lado de sus hijas.
Pero a unos días de la controversia, el mismo intérprete de Cuando mueres por alguien o Tu voz explicó que tras la difusión de las polémicas fotos recibieron diversos ataques, principalmente sus hijas, lo que los llevó a pronunciarse sobre el caso y la situación que vive al interior de su matrimonio con Andrea Legarreta.
En entrevista con Ventanenado, explicó que se encontraba en una cena con algunos amigos en la que incluso estuvo presente su padre, pero todo se distorcionó: “Andrea sabe quién soy yo, conmigo no tiene ningún problema y nos da flojera que se arme un revuelo. Al principio no le di importancia y me reí, sí me dio risa, pero después lo empiezan a subir a todos lados y comienzan a atacar a mis hijas, en qué mente debes tener para atacar a una niña y ella qué”.
“En dado caso si me hubieran agarrado saliendo de un hotel, ellas qué, la gente ofensiva y eso es lo que sí se vuelca algo desagradable, porque atacan a Andrea, me atacan a mí, infiel, ¿infiel de qué? de una foto en la que salgo platicando con alguien, no entiendo este mundo”, comentó para el programa de espectáculos.
“Si estoy en la movida no me voy a un lugar público a tomarme fotos, no tengo cola que me pisen, vivo mi vida normal, soy transparente, soy yo y no tengo nada que esconder”, concluyó con el tema.
La historia de amor de Andrea y Erik empezó cuando se conocieron por amigos en común. Ya desde entonces eran vistos por la opinión pública como un dúo inseparable, mismo que anunció su boda a tan sólo tres meses de haber iniciado su noviazgo. Así, consumaron su enlace nupcial en una romántica celebración en Acapulco, Guerrero.
Hace unos meses cumplieron 21 años de matrimonio donde mostraron en sus respectivas redes lo fuerte que es el lazo que los une. Sin embargo, todo ese tiempo compartido ha tenido sus debidas complicaciones, como los escándalos en redes sociales por declaraciones sacadas de contexto de Andrea Legarreta, las enfermedades de ambos e incluso rumores de infidelidades.
La misma presentadora confesó hace unos meses los duros momentos que han pasado como pareja y que los han llevado a replantearse el tiempo juntos.
“Nosotros hemos tenido alguna racha en donde (debíamos) tomar la decisión de ‘¿Qué onda? ¿Hasta aquí? ¿Seguimos o ya?... O sea, ¿ya? Estuvimos a punto y de pronto... No sé, no sé qué es. Yo termino por pensar que es el amor, de pronto dices ‘¿Qué será?, ¿la costumbre?, ¿será la comodidad?, ¿el ahorrarte irte a otra casa? ¿Y ahora qué?, ¿y las niñas?, ¿y cómo te vas a dividir?’”, comentó en entrevista con Yordi Rosado.
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