Emilio Fernández Romo, mejor conocido como “El Indio” Fernández, es el director más reconocido del cine mexicano en toda su historia, sobre todo de la Época de Oro.
Nacido en Mineral del Hondo, Coahuila, el 26 de marzo de 1904, “El Indio” tuvo la oportunidad de demostrar su gran talento cuando migró a Estados Unidos más de 20 años después.
Este director, actor y productor, considerado junto a Luis Buñuel como el mejor Director del Séptimo Arte del siglo XX del mundo hispano, trabajó a lado de actores y actrices como Pedro Armendáriz, Dolores del Río, María Félix y Columba Domínguez, pero su impresionante trayectoria estuvo ensombrecida también por su carácter violento e impulsivo.
Es debido a ello que alrededor de su vida existen diversos mitos que poco se han divulgado, pero que sin duda fueron parte de aquello que construyó al gran cineasta de la Época de Oro.
De actor a modelo de la estatuilla de los Premios Óscar
En 1920, “El Indio” llegó a Hollywood huyendo de México por cuestiones políticas. El actor de La bandida era un íntimo amigo de la actriz Dolores del Río, quien estaba casada con el director de cine irlandés Credic Gibbons.
Gibbons fue uno de los 36 miembros fundadores de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas en Estados Unidos, por lo que en 1928 recibió el encargo de diseñar la famosa estatuilla dorada de los Óscares.
Según cuenta la historia, la protagonista de María Candelaria propuso a Fernández como modelo, y después de mucha insistencia, finalmente el actor aceptó. A pesar de que la Academia nunca ha revelado la identidad del modelo de la estatuilla, esta es una de las teorías más aceptadas entre el público.
Militar de la Revolución Mexicana
Existe una parte de la vida de “El Indio” que es poco conocido, pero que fue crucial para su visión cinematográfica de México. Según la Secretaría de la Defensa Nacional, Fernández se unió al movimiento revolucionario, en el cual logró el grado de Capitán 1/o. de Caballería bajo las órdenes de Adolfo de la Huerta para rebelarse contra Álvaro Obregón.
En 1923 ingresó como Cadete a la Escuela Militar de Aeronáutica, pero para 1924 la abandonó para ir a Estados Unidos, donde comenzó su carrera artística,
Su padre, Emilio Fernández Garza, también fue un general reconocido de la Revolución Mexicana.
“El Indio” Fernández, acusado de homicidio en diversas ocasiones
El 30 de mayo de 1976, el cineasta se encontraba en el poblado de Viesca, en Coahuila, buscando la locación ideal para el rodaje de la película México Norte, una nueva versión de Pueblerina. En ese entonces ya contaba con 72 años.
Existen diversas versiones sobre lo que pasó: la primera es que el director de Flor Silvestre tuvo una acalorada discusión con el campesino Javier Aldecoa, a quien terminó por matar a tiros. La otra es que, según los familiares, el actor en realidad actuó en defensa propia, pero se especula que en realidad estos cambiaron su declaración después de que el acusado les ofreciera USD 4,500.
El hecho es que el asesinato ocurrió y Fernández huyó, pero fue detenido en Guatemala el día 4 de junio. Al final, se le dictó una sentencia de cuatro años y seis meses en prisión, pero quedó libre después de pagar 150 mil pesos.
El 18 de febrero de 1938 se repitió la historia, pero contra el pintor Luis Grangean López, a quien afortunadamente sólo hirió con un balazo en el cráneo, pero fue detenido debido ya que había muchos testigos en la escena. La razón por la que el actor perdió los estribos fue que pensó que el artista se había burlado de él.
Por otro lado, existe un fuerte rumor de que, cuando Fernández tenía 10 años, en un arranque de ira mató al amante de su madre, la india kikapú Sara Romo, que resultó ser su tío. Sin embargo, esta versión no ha sido oficialmente confirmada, aunque se dice que esta fue la razón por la que tuvo que unirse a la revolución.
“El Indio”, espiado por el gobierno por visitar países comunistas
Mientras transcurría la escalofriante Guerra Fría entre regímenes mundiales, “El Indio” fue blanco del gobierno debido a sus constantes visitas a países que se consideraban comunistas.
De 1979, la Dirección Federal de Seguridad obtuvo documentos de los viajes de Fernández a Cuba, con quien tenía una fuerte conexión debido a que ahí conoció a Gladys Fernández, su primera esposa, y a Rusia, en ese entonces la Unión Soviética, a quien acudió para visitar a la crotalista Sonia Amelio, de quien era muy amigo.
A pesar de estas sospechas, el actor nunca manifestó alguna simpatía por el régimen comunista, al contrario, siempre trató de mantenerse al margen. Tanto así que cuando Adela Fernández, su hija, hizo su primera comunión, la iglesia no permitió que Diego Rivera y Frida Kahlo fueran sus padrinos, pues ellos sí eran comunistas.
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