Jorge Negrete era uno de los grandes galanes de la pantalla grande. Arrancaba suspiros del público por su físico, su presencia, su voz o los demás talentos que mostraba en todas las películas que protagonizó. En todas su películas se le veía como el conquistador, el romántico o el caballero que tenía a todas en sus brazos.
En la vida real, por otra parte, había muchos rumores a su alrededor. Uno de los comentarios que más se hacían en esos días era que Negrete era arrogante y muy selecto con las personas con las que se relacionaba, pero lo cierto es que su naturaleza era más bien reservada y en ocasiones tímida.
También, para hacer una mejor comparación, se llegó a decir que era tan enamoradizo y mujeriego como Pedro Infante. No se sabe bien si Jorge compartía la costumbre de tener mujeres en sus camerinos, pero todo el mundo sabía que durante diez años estuvo ennoviado con una de las actrices más prolíficas del momento. ¿Qué otros grandes amores tuvo el “Charro Cantor”?
María Fernanda Ibáñez
No muchos supieron sobre este romance y de hecho varían las versiones, pero se ha comentado que Jorge Negrete estuvo tras la única hija de Sara García. Se conocieron en 1937 cuando María Fernanda obtuvo su primer papel protagónico en La madrina del diablo. El actor se enamoró perdidamente de ella y aquí no se sabe si sólo la cortejó o si lograron ser novios.
Lo cierto es que Sara García, una mujer de carácter fuerte, nunca aprobó esta relación y esto la llevó a despreciar al también cantante. De cualquier modo, este romance no pudo consolidarse puesto que María Fernanda se casó poco después con otro hombre y, al cabo de un tiempo, falleció a los 20 años por fiebre tifoidea.
Elisa Christy
Fue una bailarina de ascendencia española. Su verdadero nombre era Elisa Crochet Asperó y su incursión en el cine como actriz empezó en 1938 en la película La Valentina. En esta película compartió set de grabación con Jorge Negrete y se enamoraron de inmediato. Dos años después, en 1940, se casaron.
A pesar de que no tenían problemas entre ellos y que Elisa esperaba a la única hija del Charro Cantor, Diana Negrete, la pareja se divorció en 1942. Se dice que los motivos de su separación tendrían que ver con que la actriz se enteró de que Jorge se había enamorado de alguien más y prefirió retirarse.
Gloria Marín
Cruzaron caminos durante la grabación de ¡Ay, Jalisco, no te rajes! Esta película catapultaría a Jorge y a Gloria al estrellato, pero también los llevaría a tener uno de los romances más sólidos que existió durante la Época de Oro. Nunca se casaron, pero vivían como un matrimonio: vivieron juntos, compartían créditos en diversas cintas, adoptaron a una niña y su cuento de hadas duró poco más de una década.
Sin embargo, la ruptura entre ellos fue el resultado de una vida con agenda apretada, con intereses profesionales distantes, además de supuestas infidelidades. Se separaron en 1952 y lo anunciaron oficialmente como si de un divorcio se tratara; Gloria se quedó con la niña y tiempo después, en 1958, se casaría con Abel Salazar.
María Félix
Fue su último amor y quizá el más extraño de todos. 10 años antes, en 1942, se conocieron durante el rodaje de El peñón de las ánimas y se odiaron desde ese momento. Muchos dicen que fue porque Jorge sintió que “La Doña” le robó el protagónico a su pareja de ese entonces, Gloria Marín. De cualquier manera, el trato de ambos en el set fue nefasto y no se vieron las caras desde entonces.
Sin embargo, en 1952, tres meses después de que Jorge terminara definitivamente con Marín, la gran diva volvió a México luego de abandonar con excusas a Carlos Thompson, con quien se había comprometido. Nadie comprendió qué los hizo cambiar de opinión, pero al cabo de semanas ya estaban pisando el altar en una boda que fue todo un evento nacional.
No obstante, a pesar de que la relación iba bien, su historia de amor no pudo tener el futuro prometedor que hubieran querido. El 5 de diciembre de 1953, apenas un poco año después de casarse, Jorge Negrete murió a la edad de 42 años.
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