El controversial youtuber Memo Aponte volvió a ser tendencia en las redes sociales debido a sus extraños disfraces. En esta ocasión compartió su más reciente cosplay, se caracterizó de la excéntrica villana de 101 Dálmatas, Cruella De Vil.
Por medio de historias en su cuenta de Instagram, el también actor de doblaje se mostró con un largo vestido negro, un abrigo blanco, guantes rojos y una peluca bicolor (mitad blanca y mitad negra). Sus amigos también se disfrazaron, solo que ellos como perros dálmatas, con el fin de mostrar una de las imágenes más icónicas de la cinta: Cruella y los cachorros.
Su vestimenta se debió a que el pasado viernes 28 de mayo, Disney estrenó a nivel mundial su más reciente cinta, Cruella. La historia fue protagonizada por la ganadora del Oscar, Emma Stone, y relató qué fue lo que tuvo que vivir la villana, cuál fue la historia de vida que la llevó a realizar las atrocidades que fueron relatadas en las cintas de 101 Dálmatas.
“Quisiera vivir YA en un mundo donde no esté en TT cada semana el idi*ta de Memo Aponte. Aunque sea para denunciarlo. La mejor arma para erradicarlo es ¡NO HABLAR DE ÉL!”, escribió un usuario.
Algunos admiten que el problema es que se le ha dado un reflector muy amplio al actor: “el problema con Memo Aponte es que no le importa humillarse o ser criticado al máximo con tal de que se hable de él, bien o mal, pero que hablen de él porque su carrera de ‘actor de doblaje’, pues ya fue, supongo...”.
Muchos otros recordaron que en 2019 y 2020, diversas mujeres jóvenes (algunas menores de edad) lo denunciaron por acoso y violación sexual, situación que le valió que fuera expulsado por “agresión de género” de la Universidad Iberoamericana, institución donde cursaba la licenciatura: “alguien debería de quitarle el teléfono a Memo Aponte y hablo enserio. Si no está acosando menores de edad, está dando cringe”.
Esta no es la primera vez que el actor ha realizado este tipo de actos. A mediados del mes de mayo, se filtraron imágenes de él disfrazado para uno de sus videos, en aquella ocasión decidió “rendirle tributo” a una de las cintas más celebres de los años 90 y que está próxima a lanzar su secuela: Space Jam.
Debido a las fotografías difundidas de él, sus colaboradores y amigos vestidos como los Looney Toones, los usuarios de redes sociales, como Twitter y Facebook, catalogaron a los disfraces como extraños, ofensivos y perturbadores.
Internautas en Twitter apuntaron a la falta de ética por haber contratado a una persona con enanismo para realizar diversos cosplay: “Memo Aponte además de ser un tipo muy creepy, es un asco de persona. Ha sido acusado en múltiples ocasiones de acoso sexual e inclusive de violación, ha hecho ‘blackface’ en sus parodias de Soul y Space Jam, se ha burlado del enanismo y tiene un fetiche con Rapunzel”.
A finales del 2020, realizó “Un día como los personajes de Bob Esponja”. Fue uno de los video más criticados de su canal, ya que diversas personas señalaron que se había vuelto “loco” o que le provocaría pesadillas a quien lo viera, debido a que utilizaron maquillajes y adaptaciones corporales realistas.
Semanas más tarde, hizo “Un día como los personajes de Soul”. Con este contenido, las redes sociales estallaron al indicar que había realizado blackface para personificar y tratar de simular el tono de piel de Joe Gardner, protagonista de la cinta animada.
Cabe resaltar que el blackface o brownface se refiere a cuando una persona se pinta partes del cuerpo para simular ser una persona racializada negra, hecho que es considerado como racismo.
En los Estados Unidos, este tipo de maquillaje estuvo permitido hasta 1960, después fue prohibido cuando el Movimiento por los Derechos Civiles indicó que era una forma de racismo, ya que perpetuaba los estereotipos negativos por medio de burlas sobre las expresiones, acentos y apariencia de las personas negras.
Tiempo después Aponte se disculpó de forma general: “quiero pedirles una disculpa por el cosplay de mi último video. Estuvo mal y mi intención nunca fue ofender a nadie y mucho menos burlarme. Aprendimos algo nuevo y es de sabios corregir los errores. De parte mía y de mi equipo de trabajo, sinceras disculpas. No volverá a suceder”.
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