Después de años, Jennifer Lopez y Ben Affleck volvieron a ser tendencia por confirmarse que los ex prometidos se reunieron durante días después de que la cantante anunciara que su noviazgo con Alex Rodriguez terminó. Algunas personas dicen que la unión era tan fuerte que, a pesar del tiempo, en realidad, nunca se distanciaron porque su ruptura no fue causada por problemas entre ellos.
JLo conoció hace 21 años al actor mientras grababan la película Gigli, en el 2000. Ambos eran los protagonistas, pero en ningún momento su relación sobrepasó la pantalla, pues Lopez estaba casada con Cris Judd. Por dos años más, la relación continuó hasta que anunciaron formalmente su separación, en 2002.
Tuvieron que pasar sólo cinco meses para que los actores dieran a conocer que eran novios y se convirtieran en una de las parejas más mediáticas de la década de los años 2000.
Se les conoció como “Bennifer” y el amor al que reconocieron como “a primera vista”, fue tan fuerte que anunciaron su compromiso en 2002: la protagonista de Selena, presumió un anillo Harry Winston de 6.1 quilates, con un diamante rosado al centro y detalles de diamante blanco, valorado en USD 2 millones, según la revista Vanity Fair. La boda sería en septiembre del siguiente año.
A los comprometidos los siguieron a todas partes desde el inicio de su relación, ambos vivían rodeados de paparazzi que buscan seguir el siguiente paso a su matrimonio. Según el ex esposo de JLo, Cris Judd tener una relación con la cantante no era nada fácil, existía nula privacidad.
La boda era prometedora, se creía que estaría llena de lujos, pues el anillo de compromiso sólo había sido una muestra de lo que podían hacer ambos artistas para celebrar algo tan importante como su unión.
Faltaba sólo cuatro días para que el “Bennifer” llegara a lo oficial, cuando anunciaron que pospondrían la boda debido a que no se sentían cómodos con la atención que había generado su compromiso, y su relación en sí peligraba por cómo los medios hablaban de ellos.
Emitieron un comunicado de prensa en donde se leía que su relación no había terminado, pero que los planes para realizar su boda, sí. “Cuando comenzamos a considerar seriamente contratar tres ‘novias señuelo’ para tres locaciones diferentes, nos dimos cuenta de que algo estaba torcido”, se leía en la misiva.
Ben Affleck recordó que los medios y el público habían sido malo con ambos durante la relación, pues siempre los llenaban de comentarios racistas y sexistas, en donde los criticaban sólo por ser novios, dijo en entrevista para un programa de The Hollywood Reporter.
El protagonista de Atracción Peligrosa también dijo que cada cosa que él y Lopez hacían juntos, se había convertido en algo excesivamente sensacionalista, llegando al punto de que muchas historias no eran realidad. ”Siempre tenían que tener una historia del mes. Y mi relación con Jennifer Lopez resultó ser esa historia sensacionalista en el momento en que ese negocio creció exponencialmente”, declaró Affleck.
En 2004, a los pocos meses de que la boda no se llevó a cabo, Ben Affleck y Jennifer Lopez anunciaron su ruptura.
Después de su rompimiento, la pareja que trabajó en la fallida cinta Padre Soltero, se mantuvo en calidad de “exes amistosos”; Lopez se casó con Marc Anthony en el 2004 y juntos procrearon a los gemelos Max y Emme. Por su parte, Affleck contrajo matrimonio con Jennifer Garner, con quien tiene tres hijos.
Jennifer Lopez en reiteradas ocasiones confesó que tenía una muy buena amistad con su ex prometido, pero nada fue tan real como verlos nuevamente el pasado fin de semana juntos después de 17 años.
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