Un choque o shock séptico, como el que sufrió el actor Guillermo Murray y que desencadenó en su fallecimiento el día de hoy, es una afección grave que se produce cuando un infección invade todo el cuerpo, llevando a que se presente, principalmente, una presión arterial baja.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), para desarrollar un choque séptico, se tuvo que haber padecido sepsis (incluso un día u horas antes), que es una urgencia médica que se debe de diagnosticar mediante estudios clínicos, ya que de no hacerlo ocasiona daños irreversibles en tejidos, insuficiencia orgánica múltiple y pone en riego la vida.
Por tanto, un shock séptico es un tipo grave de sepsis “en el cual las alteraciones circulatorias y celulares o metabólicas son tan graves que incrementa el riesgo de muerte de manera sustancial”. Afecta cualquier parte del cuerpo, inclusive el corazón, el cerebro, los riñones, el hígado y los intestinos.
Causas
Las alteraciones pueden ser causadas por cualquier tipo de bacteria, ya sean hongos o virus (aunque en menor cantidad este último). Las toxinas que liberan las bacterias causan daño tisular. Algunos médicos e investigadores aseguran que “los coágulos sanguíneos en las pequeñas arterias ocasionan la falta de flujo de sangre y el funcionamiento deficiente de los órganos”.
Existen factores de riesgo para que se desarrolle la sepsis y, en caso de no ser tratada correctamente, se llegue a un choque sépticos y son: diabetes; alzheimer o enfermedades que deterioren la vida; enfermedades del aparato genitourinario, aparato biliar o aparato digestivo; enfermedades que debilitan el sistema de inmune (como el VIH-Sida); heridas por sondas permanentes; leucemia; uso prolongado de antibióticos; linfoma; infección por una cirugía o procedimiento médico reciente; uso de esteroides o al recibir algún transplante de órganos.
Cuando se presenta un choque séptico los síntomas visibles son: extremidades frías y pálidas; temperatura muy baja o muy alta; escalofríos; sensación de mareo; disminución o ausencia del gasto urinario; presión arterial baja (en especial al estar de pie); palpitaciones; frecuencia cardíaca rápida; inquietud; agitación; letargo o confusión; dificultad para respirar; erupción cutánea o cambio en el color de la piel; y disminución en el estado mental.
Tratamiento
Cuando una persona sufre un shock séptico, en la mayoría de los casos deberá de ingresar a cuidados intensivos en el hospital. Los tratamientos para salvar la vida de los pacientes incluyen la ventilación mecánica con respirador; diálisis; medicamentos para la presión arterial y la infección; líquidos administrados vía intravenosa; sedantes; antibióticos y, en caso de complicarse, cirugía para drenar las zonas infectadas por la sepsis.
Desafortunadamente, la OMS establece que este padecimiento tiene una alta tasa de mortalidad; sin embargo, la recuperación o perdida de la vida depende de la edad de la persona y el estado de salud en general previo a sufrir el choque, a la par de qué tan grave o que tan avanzada estaba la infección.
Para prevenir se recomienda acceder a un tratamiento oportuno de las infecciones bacterianas, incluso la vacunación puede ayudar a prevenir algunas infecciones. Sin embargo, muchos casos de shock séptico no pueden prevenirse.
En el caso del primer actor, Guillermo Murray, sufría demencia senil desde 2007 y fue diagnosticado con Alzheimer en 2012, enfermedades que fueron deteriorando a través del paso de los años el estado de salud del histrión quien no sobrevivió al shock séptico.
Guillermo Murray Muttis nació el 15 de junio de 1927 en Colón, Buenos Aires, Argentina. Fue un actor conocido en España y América Latina, se desempeñó también como director y escritor.
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