Rosalino Sánchez Félix, mejor conocido como “Chalino” Sánchez, es reconocido como uno de los pioneros de los narcocorridos y la música regional mexicana. Su historia está envuelta de muchas leyendas donde se incluyen balaceras, trágicas muertes y una carrera musical que apuntaba a ser muy prometedora.
Chalino nació el 30 de agosto de 1960 en Sinaloa. Tuvo otros 6 hermanos en total y su familia se caracterizó por ser de bajos recursos; por otra parte, este futuro cantante tendría que vivir con la ausencia de su padre, pues este murió cuando él apenas tenía 6 años. Si bien pasó los primeros años de su vida en el norte de México, Chalino tendría que cruzar a los Estados Unidos como indocumentado cuando ya era un adolescente.
Se dice que se estableció en la ciudad californiana de Inglewood, donde vivía una tía suya. Ahí se dedicó a muchas labores tanto legales (como lavar autos y ser lavaplatos), como ilegales (dicen que vendía droga como marihuana y cocaína, además de ser un “coyote” en la frontera). Lo que sí se mantenía hasta por miembros de su familia, es que Chalino tenía cierta inclinación hacia la música y, desde niño, tuvo el sueño de convertirse en un cantante famoso.
Aun así, se desconoce si por estos años (finales de los 70 y principios de los 80) hizo alguna composición. Su verdadera inspiración llegaría a través de otra tragedia que ensombreció a su familia: en 1984 su hermano mayor, Armando, fue encontrado en un hotel de Tijuana. Lo habían asesinado a balazos. El mismo compositor admitió que este fue el detonante necesario para acercarse a la música y hacer una canción para conmemorar a Armando y de ahí no pararía.
Hay una versión que indica que, en el mismo año en que su hermano falleció, Chalino fue encarcelado. No se saben los motivos, pero que dentro de prisión comenzó a hacer corridos que aludieran a historias de sus compañeros de prisión y de toda aquella persona que tuviera algo interesante que contar. Los pagos que le hacían al cantante variaban entre cada caso, siendo que le dieran dinero o incluso que le recompensaran con armas.
Sea como sea, en algún momento de su vida hubo alguien que le recomendó al sinaloense ir a los Estudios San Ángel, ubicados en la ciudad de Los Angeles. Ahí grabó sus primeros demos y continuaría sacando canciones hasta que, en algún punto de su vida, llegó a cruzarse con Pedro Rivera, padre de Lupillo y Jenni Rivera. Sin embargo, su verdadero ascenso a la fama ocurriría en 1992 durante una presentación muy local en la ciudad de Coachella.
Y es que al parecer en esa ocasión, mientras Chalino estaba dando su concierto, un hombre (ubicado por el nombre de Eduardo Gallegos), subió al escenario con pistola en mano y disparó contra el cantante y, en medio de lo que se presume que fue un estado de alteración, a otros espectadores del recinto. Aquí también varían las versiones, pues se dice por una parte que Gallegos fue enviado para matar a Chalino y otros dicen que el hombre en cuestión estaba bajo el influjo de una sustancia prohibida.
De cualquier modo, aunque logró darle un disparo al cantante de Sinaloa, este no sólo no murió, sino que pudo sacar una pistola y se defendió lanzando disparos también. Aunque Chalino estuvo hospitalizado un tiempo, logró sobrevivir y desde ese momento su nombre comenzó a convertirse en una leyenda entre la población mexicana en la frontera y la hispanohablante en Estados Unidos. Su música comenzó a venderse mucho mejor.
No obstante, esta historia llegaría a su fin de forma repentina. Luego de unos meses de que ocurriera el incidente de Coachella, el 15 de mayo Chalino estaba en la ciudad de Culiacán. Luego de dar un concierto en un centro nocturno de dicha ciudad, y que el cantante se encontrara en un vehículo acompañado de algunos familiares suyos, sería abordado por un grupo armado que viajaba en camionetas.
De ahí se dice que estos hombres, al dirigirse al cantante, se presentaron como gente que trabajaba en la policía. Un supuesto comandante quería verlo para hablar con él sobre algo; Chalino, quien no quería darle problemas a su familia y el resto de sus acompañantes, accedió de buena gana y se marchó con este grupo. Sin embargo, durante la madrugada del día siguiente, testigos encontrarían el cuerpo de Chalino en un canal de agua, todavía en Culiacán. Según se informó, le dispararon en la cabeza.
El reconocimiento de Chalino todavía siguió presente por muchos años. Tanto así que su propio hijo, Adán Sánchez, siguió sus pasos y se hizo cantante como su padre. Pero la leyenda no sólo quedó ahí, puesto que la historia de Chalino no sólo alcanzó a muchos a través de varios rumores que corren alrededor suyo, sino porque sigue siendo del gusto de muchas personas.
Una de ellas, para sorpresa de mucha gente, es nada más y nada menos que el rapero estadounidense Snoop Dogg. El músico de 49 años ya ha demostrado en varias ocasiones su inclinación por la música mexicana, específicamente la de género regional. Prueba de ello fue su peculiar colaboración con la Banda MS en 2020 con la canción Qué Maldición.
Ahora, a través de su redes sociales le mostró a todos su afición por este género musical, además de su conocimiento en el terreno. En un video publicado en su cuenta de Instagram, mientras el rapero fumaba un poco de marihuana, es posible escuchar de fondo Nieves de enero, uno de los temas musicales más conocidos de Chalino Sánchez. Así, luego de cantarla, Snoop Dogg concluyó el video con un “¡Viva México!”.
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