Hace un año Gerardo Bazúa, ex pareja de Paulina Rubio y padre de su segundo hijo, interpuso una demanda en contra de la cantante y solicitó ser el padre legal de Eros ya que no se le permitía ver a su hijo. Ayer se le otorgó oficialmente la paternidad a Bazúa y Rubio tendrá que aceptar compartir la custodia del niño.
El conflicto legal inició debido a que el ex concursante de La Voz México denunció que desde 2019 sólo había podido ver a Eros por 20 minutos, esto debido a que la cantante había usado su poder económico para esconderlo, incluso llegando a cometer acciones que ponen en riesgo la integridad del niño.
Bazúa pidió ante la corte ser reconocido como padre biológico y legal de Eros para poder verlo, pero solicitando que la manutención no cayera en él, pues la diferencia de ingresos entre él y la cantante son muy diferentes, además solicitaba que Rubio le pagara la manutención, una indemnización y un seguro de vida.
Los cantantes nunca llegaron a unirse en matrimonio, por lo que posiblemente Eros nunca recibió el apellido de su padre y no fue reconocido como su hijo, esto permitió que Paulina gozara se su custodia completa.
Finalmente, tras varias audiencias, el juez encargado del caso determinó el pasado 13 de abril que Bazúa es el padre de Eros y se firmó un acuerdo de confidencialidad por el cual no se ha revelado información sobre cómo se repartirán las obligaciones como padres.
Según Despierta América, lo que se sabe es que el hijo de los cantantes tendrá como residencia oficial al estado de Florida, Estados Unidos, y, como cualquier menor, no podrá ser llevado a otro país sin el permiso de ambos padres.
Gerardo confesó el año pasado que se había separado de Rubio debido a que la cantante había tenido episodios violentos en contra de él en lugares públicos y jamás había pedido ayuda de autoridades porque creía que era algo “muy personal”.
“Un día me tocó estar comiendo en Ocean Drive, acá en Miami, y ella se levantó de su mesa y me empezó a golpear y me persiguió por las calles para golpearme. Lo logró, yo me fui, hui del lugar y ella me persiguió para golpearme”, dijo Bazúa en una audiencia en la que participó como testigo.
Según las declaraciones de Bazán, la “Chica Dorada” desde su separación habría recurrido a amenazas para mantenerlo lejos de su hijo, incluso denunció que en una ocasión policías lo persiguieron cuando intentó visitar a Eros.
La audiencia en la que el cantante reveló los abusos de su ex pareja se llevó a cabo de manera virtual y fue de “emergencia”, debido a que el padre de su otro hijo, Nicolás “Colate” Vallejo Nájera, intentó llevar a Andrea Nicolás a España y Rubio no lo quería permitir, pues consideraba que se estaba poniendo en riesgo la integridad del niño.
En abril del año pasado Vallejo-Nágera se presentó ante el juzgado número 11 de Miami para solicitar la custodia completa de Andrea Nicolás, el hijo mayor de Paulina. Según el empresario español, el menor de edad vive en un “ambiente tóxico y violento”, en el que sufre de maltrato por parte de su madre, su abuela y su tío, por lo que ya presenta cuadros de ansiedad, náuseas y vómitos.
A pesar de que ambos padres de los niños declararon que la “Chica Dorada” nunca había agredido a sus hijos ni actuado violenta con ellos, declaraban temer por la salud mental de Andrea y Eros, pues siempre tenían que presenciar los cambios abruptos de humor y los arranques de ira de la cantante.
SEGUIR LEYENDO: