La llamada dinastía Pinal se encuentra pasando por un crudo momento familiar pues luego de las declaraciones de Frida Sofía en las que la joven de 30 años se sinceró con el periodista Gustavo Adolfo Infante, a quien confió duros pasajes que vivió en su infancia y adolescencia, la información continua surgiendo.
Las confesiones de la única hija de Alejandra Guzmán respecto al presunto abuso sexual del que fue víctima desde su infancia a manos de su abuelo Enrique Guzmán causaron conmoción no sólo en los titulares de espectáculos, sino que hizo eco en otros ámbitos sociales, como en la esfera feminista, pues en Twitter se hizo tendencia el marcador #YoTeCreoFrida con el cual diversos usuarios aseguraron que cada víctima estará lista para denunciar a su agresor en su propio momento, aun hayan pasado años o décadas.
Pero fue el mismo intérprete de Payasito quien defendió su honor y en una entrevista con Pati Chapoy declaró no haber procedido nunca en contra de su nieta, y “no haberla tocado” jamás, a la vez que puso en duda su estabilidad mental, asegurando que la también coach de fitness estaría accediendo a vender entrevistas escandalosas con tal de generar ingresos luego de presuntamente haber dejado de recibir abonos de su madre para apoyarla.
A la controversia se han sumado las voces de Alejandra y Luis Enrique Guzmán, quienes han salido en defensa de la honra de su padre, de quien aseguran es un hombre ejemplar y todo un caballero, como el mismo intérprete de La plaga lo expuso en Ventaneando con lágrimas en los ojos y evidente consternación.
Después, nuevamente “la reina del rock” dio a conocer en declaraciones que busca un acercamiento y consecuente reconciliación con su primogénita, quien lleva más de dos años exponiendo escandalosos detalles de una de las familias más populares del espectáculo mexicano.
Además destacó que por su padre “pone las manos al fuego” y además invitó a la modelo y cantante de 30 años a que busque un terapeuta que las ayude a mejorar su relación.
Entre los dimes y diretes se encuentra la matriarca de la familia, Silvia Pinal, pues Frida Sofía aseguró que Enrique Guzmán habrá violentado sexual y físicamente a la diva del cine nacional.
Aunado a ello, los dichos de la hija de Alejandra Guzmán encuentran eco en el libro escrito por Pinal, Ésta soy yo, que sirvió como guía argumental para la bioserie de la veterana actriz, y donde se relata que Enrique era un abusador agresivo que la violentó más de una vez.
A sus 89 años, Silvia se encuentra residiendo en su departamento en Acapulco, alejada de los rumores y el fuerte ruido mediático de su “dinastía”, se dice también que la histrionisa se estaría evadiendo voluntariamente o no, de los escándalos de la familia para evitar el atosigamiento de la prensa.
“Silvia Pinal continúa en Acapulco, ella no va a salir de su departamento, la tienen muy bien cuidada, hablaron con ella, le contaron cómo está la situación, tratan que no vaya a sufrir ningún disgusto”, informó el reportero Marco Antonio Silva en su canal de YouTube.
La familia y el personal que asiste a Silvia han propiciado que la controversia mediática y social del caso en el que se le acusa a Enrique de abuso sexual a su propia nieta, se mantenga al margen de acceso a la información de la diva. Y es que buscarían evitar algún estrago en su salud a causa del impacto de la reciente polémica, por lo que han difundido que la familia ha hecho lo posible porque no se entere de la situación.
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