En 1995 el estreno del documental titulado El clóset de celuloide (The Celluloid Closet) habría revelado que el profundo odio entre Judá Ben-Hur y Messala, personajes principales de esta película, tendría como verdadero origen su romance homosexual de la juventud. Se trata de una parte de la trama que habría sido incluida de manera implícita.
Gore Vidal, guionista de la cinta estrenada en 1959, convenció al actor que daba vida a Messala (Stephen Boyd) y al director de la película, William Wyler, de que la enemistad existente entre los personajes debía tener un origen más profundo; es decir, que los dos hombres tuvieron una vez una relación homosexual que Messala quería reanudar pero Ben-Hur no; de acuerdo con la entrevista que dio en El Clóset de celuloide.
Este documental se basó en el libro y la serie de conferencias de Vito Russo, historiador de cine y activista por los derechos LGBT, en esta producción los directores Rob Epstein y Jeffrey Friedman exploraron la casi imperceptible representación de la diversidad sexual dentro de películas Hollywoodenses hechas en las décadas de los 40, 50 y 60.
Quien nunca supo de este subtexto en la trama de la película fue el actor que dio vida a Ben-Hur, se trata de Charlton Heston, el guionista de la cinta decidió no informarle sobre esta decisión por temor a que se negara a aceptar el papel, ya que era muy conservador y de ideales rígidos.
Aunque en ese momento Heston desarrolló su personaje sin objeción alguna, tras el estreno de El clóset de celuloide, se molestó profundamente por las declaraciones de Vidal por considerar que no tuvo la participación suficiente como para confesar esa libertad creativa y escribió una queja a un periódico.
En dicha carta publicada el 17 de marzo de 1996 en el diario estadounidense The LA Times, Heston afirmó que Vidal tuvo un papel mínimo en la escritura de Ben-Hur, también expresó que Vidal “produjo una escena de varias páginas que Wyler rechazó después de una lectura completa”.
“La afirmación de Vidal sobre una escena que implicaba una relación homosexual entre los dos hombres insulta a Willy Wyler y, tengo que decirlo, me irrita muchísimo”, concluyó Heston.
Ben-Hur (1959) está ambientada en Judea, un territorio sometido por el Imperio Romano y transcurre en el año 30 después de Cristo, la trama se centra en que los pobladores esperan la llegada de un Mesías que liberará al pueblo judío.
Entre los habitantes está un respetado príncipe rico, quien comercia especias con Oriente, su nombre es Judá Ben-Hur -interpretado por Charlton Heston; ante la posibilidad de un levantamiento violento, el gobierno Romano envía dos legiones a la región, las cuales estaban dirigidas por el jefe militar Messala-interpretado por Stephen Boyd-, amigo de la infancia del protagonista.
La paz entre Ben-Hur y Messala se rompe por diferencias ideológicas entre ellos, mientras el primero ve en el jefe militar una esperanza de cambio para su pueblo, Messala ve a su viejo amigo como alguien que delatará a los enemigos judíos de Roma por respeto a la pasada relación. Ante la negativa de Judá, el jefe militar se enoja y decide romper las interacciones entre ambos.
Mientras que Stephen Boyd (Messala) era plenamente consciente de la tensión que ocurría entre los personajes principales, Heston desconocía que la verdadera razón por la que su personaje (Ben-Hur) odiaba el jefe militar era un romance homosexual de la juventud.
De manera que gran parte del equipo de producción trabajó en la cinta hasta convertir esta relación amorosa en un hecho imperceptible no sólo para Heston sino para el público que apreciaría la película.
Este clásico de Semana Santa que se transmite en diversas televisoras ganó 11 premios de la Academia, récord sólo igualado por cintas como Titanic (1997) y El señor de los anillos: El regreso del rey (2003).
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