A cuatro años de que se popularizara la fiesta de Rubí Ibarra García, la joven de 19 años recordó lo complicado que fue convertirse en la quinceañera más famosa de México, después de que se viralizara la invitación a su fiesta que XV años.
La joven estudiante originaría de La Joya, San Luis potosí, quien en diciembre del año 2016 festejara su cumpleaños número 15, hoy se encuentra cerrando ciclos.
Después de que se creara un evento en Facebook al cual confirmaron asistir más de 1.3 millones de personas, Rubí comenzó a enfrentarse a lo que se había convertido en un evento público, pues todos querían asistir a la fiesta del año.
En una conversación que tuvo la potosina con la revista TV y Notas declaró que su fiesta se convirtió en un martirio para ella, pues pasó de ser una adolescente ilusionada por su celebración a sufrir burlas y comentarios por parte de conocidos y desconocidos.
Toda esta situación provocó que no disfrutara su fiesta e intentara que todo volviera a la normalidad. Sin embargo, no lo logró, fue una evento que la sobrepasó por lo que necesitó de ayuda psicológica para superar lo que había pasado.
“...fui varias veces al psicólogo porque todo lo que me dejó esa experiencia fue terrible, estuve en shock literalmente; sin embargo, puedo decir que después de las consultas con el psicólogo no sentí que haya mejorado, no sentí ese apoyo”, declaró la joven.
En su momento, sus amigos y parientes la orientaron diciéndole que no hiciera caso a lo que se comentaba de ella, a pesar de que eso representaba un sufrimiento. Rubí es consciente de que nadie la entendía por eso confió en la terapia aunque no le funcionara.
Derivado de ello, aseguró que lo que realmente le ayudó a pasar página fue el apoyo de su familia, pues son ellos los que han fortalecido su autoestima, emociones y mentalidad.
“Al principio pensé: “Ir al psicólogo probablemente me ayudará a sentirme mejor”. Dicen perfectamente que los psicólogos no te van a curar, pero son un apoyo, ¿no? Yo no lo sentí así; me sentía igual o incluso hasta peor. Me daban medicamentos que, la verdad, no sentí ninguna mejoría porque me miraba igual, decaída”, confesó.
Fue un momento complicado que vivió la familia Ibarra García, todo por el descuido de quienes grabaron y publicaron el video ya que, en lugar de mantenerlo exclusivo para los invitados como se había planeado, lo dejaron público. Motivo por el cual toda persona que tuviera una cuenta en la red social podía aceptar la invitación.
Confirmaron acudir más de 1 millón de personas, pero al final asistieron 30 mil, entre los que destacó la presencia del gobernador de San Luís potosí, el abogado Juan Manuel Carreras.
Para Rubí, los medios de comunicación no ayudaron a controlar la situación, pues confiesa que ellos hicieron que se viralizara más llegando a otros países.
“En aquel momento las personas me acosaban. Venían hasta mi casa medios de comunicación de varias partes del mundo y nos fotografiaban sin consentimiento; eso fue para mí lo más horrible que me ha pasado”, dijo la potosina para la revista.
Actualmente, Rubí Ibarra tiene 19 años de edad y se encuentra estudiando una licenciatura en Comunicación con especialidad en televisión. Para ella, los recuerdos de su fiesta de XV años son dolorosos. Sin embargo, confiesa que actualmente aprendió a manejar sus redes sociales, tiene un perfil más cerrado aunque le gusta compartir algunas cosas de su vida privada, con lo que logró cerrar ese caótico episodio de su vida.
SEGUIR LEYENDO: