Aunque la pareja no ha dicho nada aún, Kim Kardashian y Kanye West están al borde de la separación tras ocho años de relación, cuatro hijos en común y millones en juego. En secreto estarían negaociando cómo repartirán su fortuna. A cargo de la disolución de su matrimonio está la temida abogada Laura Wasser, que ha representado a famosos de Hollywood como Angelina Jolie, Britney Spears y Johnny Depp.
El músico, de 43 años, y la empresaria, de 40, firmaron un contrato prenupcial en marzo de 2014, dos meses antes de su millonaria boda en Florencia, Italia. Según este acuerdo en caso de divorcio, Kim Kardashian recibirá un millón de dólares por año de matrimonio con Kanye West con límite de USD 10 millones.
La mediática también puede conservar todas las joyas y regalos que le haya dado su ex marido y ser la beneficiaria de un seguro de vida de 20 millones del rapero, según informó el sitio Radar Online. Pero este arreglo por escrito ahora no convencería a la pareja ya que cuando lo firmaron no eran tan ricos como los son ahora.
Hoy la situación ha cambiado mucho y el acuerdo parece obsoleto. En 2014, el cantante estadounidense tenía una fortuna de USD 100 millones, contra USD 40 millones de su esposa. Kardashian ahora posee 780 millones, frente a los 1.300 millones de West.
Además de negociar ciertos detalles que no aparecerían en su contrato matrimonial en el caso de tomar caminos por separado, Kardashian y West tendrán que ponerse de acuerdo con la custodia de sus hijos: North, 7, Saint, 5, Chicago, 2, y Psalm, 19 meses.
La pareja también está discutiendo sobre su propiedad en Calabasas, California. Al parecer, de acuerdo a la prensa local, el mayor escollo en las conversaciones del acuerdo de divorcio podría estar en la casa familiar, que se sometió a un rediseño total ideado por West y que la revista Architectural Digest la describió como “un oasis de pureza y luz”.
El poderoso matrimonio trabajó en su mansión minimalista totalmente blanca con el reconocido diseñador belga Axel Vervoordt. Pagaron USD 40 millones por la imponente propiedad y gastaron USD 20 millones en renovaciones.
Aun así, ni Kim ni Kanye necesitan el uno del otro para vivir tranquilamente.
De acuerdo a lo informado por Forbes, el rapero tendría una fortuna que alcanza los USD 1.260 millones. Pero en abril del año pasado fue el mismo West el que envió a la revista un mensaje en el que aseguraba que su patrimonio era mucho mayor. “No son mil millones. Son USD 3,3 mil millones (los que tengo), nadie en Forbes sabe contar”, señaló el polémico músico. Pese al enojo de West, la revista defendió su cifra.
La mayor parte de la fortuna de West proviene de su marca de calzado Yeezy. El valor de la empresa está vinculado a Adidas, que fabrica, comercializa y distribuye el calzado.
Forbes calcula que Kim Kardashian tiene una fortuna que se aproxima a los USD 750 millones. La mayor parte de su dinero se encuentra en una marca con su nombre. En octubre de 2020, la publicación estimó que la participación del 72% en su compañía de cosméticos KKW Beauty tiene un valor de aproximadamente de USD 500 millones.
Además Kardashian ganó millones de dólares tras 13 años de protagonizar el reality “Keeping Up With the Kardashian”. A esto se suma su marca de ropa interior Skims. Sin embargo, su mejor día empresarial fue el año pasado cuando sumó más cifras a su fortuna con la venta del 20% de KKW Beauty a la compañía multinacional Coty, por nada menos que USD 200 millones en efectivo.
La pareja es propietaria de varias casas, incluida la mansión ubicada en Calabasas, Los Ángeles, un condominio en Miami y dos ranchos en Wyoming. De acuerdo con los documentos que West envió a Forbes el año pasado, también hay en juego USD 5 millones en obras de arte, USD 4 millones en vehículos y USD 3,2 millones en joyas.
Los rumores en torno al matrimonio de West y Kardashian se sucedieron a lo largo de 2020, especialmente por el extravagante anuncio de West de que quería optar a la presidencia de Estados Unidos. Las desconcertantes aspiraciones políticas de West unidas a un comportamiento muy errático e impredecible en las redes sociales han hecho sonar las alarmas en torno a la salud mental del músico, quien padece un trastorno bipolar.
La pareja ya tiene vidas separadas y su crisis no tendría solución.
Este sería el tercer divorcio para Kim Kardashian. Anteriormente contrató a Wasser para terminar su relación con el jugador de la NBA, Kris Humphries, tras su fugaz matrimonio de 72 días en el año 2011. Antes de Humphries, se casó con Damon Thomas, un productor musical, con quien mantuvo una relación de tres años.
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