“Gambito de Dama” superó las 62 millones de reproducciones en sus primeros 28 días de estreno. Esto la convierte en la miniserie más vista en la historia de Netflix hasta la fecha, según publicó el gigante de streaming en su cuenta oficial de Twitter.
Además, Netflix señaló que el programa de siete episodios se clasificó entre los 10 primeros en 92 países y en el número 1 en 63 países, entre ellos el Reino Unido, Argentina, Israel y Sudáfrica.
La serie, protagonizada por la actriz y modelo estadounidense de origen argentino-británico Anya Taylor-Joy, de 24 años de edad, como la estrella de ajedrez Beth Harmon, fue lanzada el 23 de octubre y está basada en la novela homónima de Walter Tevis.
Escrita por Scott Frank, “Gambito de Dama” (”The Queen’s Gambit”) relata la vida de una huérfana y prodigio del ajedrez. Ambientada en la época de la Guerra Fría, la historia sigue a Harmon, desde los 8 a los 22 años, mientras lucha contra la adicción en la búsqueda de convertirse en la mejor jugadora de ajedrez del mundo.
“Es un verdadero testimonio de la habilidad de Scott como escritor y cineasta que fue capaz de dar vida ante la cámara al drama y los detalles de las muchas partidas de ajedrez”, dijo el vicepresidente de contenidos de Netflix Peter Friedlander.
Ante la noticia, la reacción de Anya Taylor-Joy fue inmediata, al igual que todos los fanáticos de la serie. La actriz se mostró muy emocionada y agradeció a los seguidores del programa.
Al respecto, este fin de semana, el mejor ajedrecista del mundo Magnus Carlsen fue consultado por su opinión de la serie de moda. Al campeón noruego de 29 años le encantó el programa; sin embargo, no tardó en destacar que aún falta “hacer un gran trabajo” para terminar con el machismo en el mundo del ajedrez.
“No creo que las mujeres tengan una habilidad menos natural para ser grandes en el ajedrez en comparación con los hombres”, expresó Carlsen al medio Insider. Y consideró que la serie refleja a la perfección sobre la problemática de género en el ámbito del ajedrez que sigue en la actualidad.
“Este es un problema que ha existido en el mundo del ajedrez durante mucho tiempo. Creo que definitivamente hay un gran trabajo por hacer”, determinó. Y agregó: “En general, las sociedades de ajedrez no han sido muy amables con las mujeres y las niñas a lo largo de los años”, opinó el experto que se convirtió en campeón de esta disciplina a los 22 años.
Para el ajedrecista, es necesario promover un “cambio cultural” sobre las cuestiones de género y, por eso, propuso modificar el formato de los torneos de ajedrez para hacerlos más igualitarios. Al respecto, sugirió que no deberían existir diferenciaciones de género en el ajedrez, sólo torneos abiertos que no diferencien entre hombres y mujeres. “Debería haber solo torneos ‘abiertos’ o solo torneos masculinos y femeninos”, afirmó.
En relación con los detalles de la serie de Netflix, opinó: “Me encanta el hecho de que una vez que Beth comenzó a tener resultados y quedó claro que tenía una gran habilidad no quedó mucho lugar para los ‘no creo que pueda ser buena porque es una mujer’”.
Carlsen, que juega al ajedrez desde los cinco años, dijo que el programa le enseñó algo nuevo sobre su propio mundo. “Había una serie de fragmentos que no conocía y son muy pintorescos”, aseveró.
Sin embargo, el jugador también dijo que algunos elementos se basaban más en la ficción que en la realidad. “Hubo algunas cosas que me desconcertaron, como el hecho de que ella fuera tan mala en el blitz cuando lo intentó”, consideró.
Blitz es una forma rápida de ajedrez en la que los jugadores tienen alrededor de tres minutos para realizar todos sus movimientos.
“Esperaría que alguien con tanta comprensión y tanta habilidad pueda jugar blitz al menos decentemente”, dijo.
Otra escena que desconcertó a Carlsen en el programa fue una partida de ajedrez jugada por el personaje de Harry Beltik, una celebridad local del ajedrez, en el episodio dos. “¿Ofreces un empate y luego renuncias de inmediato? Eso en realidad no sucede”, dijo Carlsen, que se proclamó campeón mundial el 22 de noviembre de 2013, con lo que fue el segundo campeón más joven de la historia después de Garry Kaspárov en 1985.
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