“Nuestra nueva normalidad es lavarnos la boca antes de cada toma de una escena de besos”, explicó el actor neozelandés K.J. Apa, quien interpreta a Archie Andrews en la serie “Riverdale”. La declaración tuvo lugar en un video que los creadores de la serie publicaron para mostrar las nuevas medidas sanitarias que se toman para rodar en Hollywood durante la pandemia de COVID-19.
Tras meses en los que la industria del cine y la TV estuvieron paralizadas, los actores están volviendo a los sets de rodajes. No obstante, las condiciones son muy distintas debido a los estrictos controles y medidas sanitarias tomadas para evitar contagios. Chequeos constantes, uso de máscaras y otras reglas son parte de la rutina en cualquier locación. En los estudios de filmación, elenco y staff deben seguir esos protocolos, y sobre todo cuando hay que filmar escenas íntimas entre miembros del reparto.
En el caso de “Riverdale”, las escenas en las que los intérpretes tienen que besarse deben tomar un vaso de enjuague bucal durante casi un minuto antes de una toma. Así lo ha mostrado K.J. Apa, en su cuenta de Instagram junto a su compañera Camila Mendes, quien interpreta Verónica Lodge en el programa que está pleno rodaja de la quinta temporada.
Ambos actores dan vida a una de las parejas principales de la serie.
Tras la publicación del video, otros miembros del elenco salieron a hablar con humor sobre la experiencia. La actriz Lili Reinhart afirmó que el líquido quema, mientras que su compañera Bernadette Beck bromeó y pidió que la medida de seguridad se vuelva el estándar en todas las escenas que impliquen besos.
El sexo será más falso que nunca en el cine y la TV en un Hollywood poscuarentena. Considerando que las escenas de acción o en las que se realice una actividad sexual pueden incrementar el riesgo de transmisión del virus, las normativas de seguridad sugieren mantener el menor contacto posible.
En el caso de las escenas de sexo, puntualmente, los sindicatos aconsejaron la reescritura del guión, así como descartar la secuencia o la utilización de imágenes realizadas por computadora (CGI por sus siglas en inglés) para evitar el contacto físico.
Para reactivar la industria del entretenimiento después de que la pandemia de coronavirus la paralizara por varios meses, se establecieronn estrictos un protocolo de producción a fin de permitir la reapertura de los sets de filmación.
La asociación de editores de cine, por ejemplo, confeccionó un documento donde plantea que los estudios deben proveer elementos de protección y realizar pruebas de diagnóstico obligatorias tanto al elenco como al equipo de producción.
El protocolo establece, entre otras medidas, que debe reducirse la cantidad de personas presentes detrás de cámara en las filmaciones, el uso obligatorio de mascarillas o la ausencia total de público presente en los programas de televisión.
El presidente del Sindicato de Directores de Estados Unidos (DGA por sus siglas en inglés), Thomas Schlamme, explicó en un comunicado que las pautas de salud y seguridad tienen como objetivo proteger a los trabajadores y artistas en la medida en la que se retoman las actividades.
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