El legendario tenor Plácido Domingo se enfrenta a una serie de acusaciones por acoso sexual, que resultaron creíbles según las averiguaciones que realizó la Ópera de Los Ángeles (LA Opera), institución que dirigió el español entre 2003 y octubre pasado.
De acuerdo con LA Opera, el resultado se dio luego de que entrevistó a al menos 44 personas, lo que arrojó 10 acusaciones de actividades inapropiadas, por parte Domingo, que van desde el coqueteo hasta los avances sexuales, dentro y fuera del lugar de trabajo.
Una portavoz de LA Opera dijo que los detalles sobre la naturaleza de la conducta inapropiada no se darán a conocer públicamente, ni el informe completo; sin embargo, destacó que de acuerdo con el bufete de abogados de Gibson, Dunn & Crutcher, Domingo “negó todas las acusaciones de contacto no deseado y sostuvo que todas sus interacciones fueron consensuadas”.
La institución cultural destacó que algunas mujeres señalaron que no se sintieron incómodas, pero otras describieron el trauma significativo que les causó el tenor.
Hace dos semanas, el tenor aseguró en un comunicado que aceptaba “toda la responsabilidad” de sus acciones, tras “varios meses” de reflexión, y pidió perdón “por el dolor causado” a todas las mujeres que le acusaron.
Al inicio de dicha averiguación, el equipo legal envió cartas a los empleados y extrabajadores de LA Opera, para que cualquiera pudiera contactar o compartir datos vinculados con el caso.
Dos mujeres relataron que sí hubo contacto físico por parte del tenor español y 18 fuentes anónimas también lo confirmaron.
En tanto, la cantante Angela Turner Wilson declaró abusos y contacto físico no consentido por parte de Plácido Domingo y utilizó medios de comunicación para expresarlo.
Turner Wilson trabajó con Domingo durante la temporada 1999-2000, en Washington, D.C., cuando el tenor fue director artístico, y declaró para la agencia AP que cuando ella y Domingo se maquillaron juntos, él se paró detrás de ella, deslizó sus manos dentro de su bata y debajo de los tirantes del sujetador, y agarró su pecho.
Por su parte, Christopher Koelsch, presidente y director ejecutivo de LA Opera, informó que la compañía planea implementar estrategias para investigar y resolver quejas de los empleados.
“A nivel personal, estoy preocupado, y lamento, que las personas comprometidas con la empresa puedan haberse sentido sin poder, vulnerables o desatendidas de alguna manera”, escribió Koelsch.
“Hemos aprendido a través de este proceso que existe una duda generalizada en toda la industria para denunciar el acoso, y es fundamental para nuestro futuro que trabajemos para generar confianza y transparencia entre nosotros”, agregó Koelsch.
El futuro de Domingo en la ópera sigue en juego, ya que varios teatros de ópera y festivales de todo el mundo lo han recibido para presentaciones de primavera y verano, pero otros, como el Instituto Nacional de Artes Escénicas y Música, con sede en Madrid, y el Royal Opera House de Londres han cancelado espectáculos con él.
El martes, el Staatsoper Hamburg, en Alemania, anunció que Domingo se retiró de sus actuaciones programadas a fines de marzo y principios de abril de “Simon Boccanegra”, citando el consejo de sus médicos y las preocupaciones sobre el coronavirus.
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