Aunque la reina Isabel II ha expresado en público su respeto y solidaridad con la decisión del príncipe Harry y Meghan Markle de abandonar la familia real, en privado parece ser un tema muy doloroso que evita tocar.
“La Reina estará muy decepcionada”, dijo el historiador de la familia real británica Robert Lacey a People. “Su trabajo es sobrevivir”, y asegurarse de que la monarquía sobreviva.
Y es que no es la primera vez que Isabel II lidia con los constantes escándalos de un miembro de su familia. Algo que influyó en su decisión de dejar que Harry se separara de la corona británica fue su experiencia con su hermana menor, la princesa Margarita (1930-2002).
“Ella tiene una sensibilidad particular por lo que Harry ha estado pasando debido a su cercanía con Margarita y al ver los mismos dramas y tensiones que se desarrollaron hace dos generaciones”, dice Lacey.
Margarita, quien fue la segunda en línea para ocupar el trono, siempre luchó por no ser la sombra de Isabel II.
“El síndrome del hermano menor es un problema permanente”, dice el historiador. “El sistema no ha encontrado una manera de darles el reconocimiento que necesitan”.
Y en este sentido, al tener hijos el príncipe William de Cambridge, su hermano mayor, el conflicto solo empeora.
“Hasta que Isabel tuvo herederos, Margarita era una posible futura reina”, agrega Lacey. “Es una situación familiar de conflicto que se remonta a generaciones”.
Cabe mencionar que, a pesar de los constantes escándalos de la princesa Margarita, sobre todo por sus relaciones extramaritales, no renunció a la Corona ni a sus deberes como miembro de la familia real.
Ante el inminente “Megxit” (como nombró la prensa en Reino Unido a la salida de Harry y Megan con "los royal”), programado el próximo 31 de marzo, los nuevos arreglos serán revisados en un año.
“(La reina Isabel II) no detendrá en la salida”, mencionó el biógrafo real Ingrid Seward al mismo medio. “Ella es muy pragmática. Ha dejado la puerta abierta para Harry, especialmente: el año de la revisión fue pensando en Harry”.
Meghan y Harry se reunirán con la Reina y el resto de la familia real el 9 de marzo para el servicio anual de la Commonwealth, en la Abadía de Westminster. Asimismo, asistirán el 5 de marzo a los Premios del Fondo Endeavour y el día 7 al Festival en el Royal Albert Hall.
Después, la pareja regresará a Canadá, donde comienzan a establecerse en su nueva vida no real con su hijo Archie.
El “castigo” de la Reina y la reacción de Harry y Meghan
Cabe mencionar que en todo el proceso de separación, la Reina permitió que la pareja siguiera usando su título de duques de Sussex; sin embargo, la semana pasada trascendió que no podrán usar la palabra “royal”, y es que, hace unas semanas, surgió el rumor de que Meghan y Harry habían registrado su propia marca (Sussex Royal), para vender diversos productos que van desde tarjetas de felicitación hasta ropa.
Horas después de que se diera esta noticia y la opinión pública en el Reino Unido aplaudiera la decisión de Isabel II, con el argumento de que si los duques de Sussex no quieren formar parte de la familia real no tendrían por qué venderse como royals, Meghan y Harry dieron su respuesta en su sitio web Sussex Royal con un comunicado en el que explicaron cuál era su plan de trabajo, pero aceptando la nueva regla que podría afectar la rentabilidad de su fundación.
“Si bien la Monarquía o la Oficina del Gabinete no tienen jurisdicción sobre el uso de la palabra ‘royal’ en el extranjero, el duque y la duquesa de Sussex no tienen la intención de usar Sussex Royal ni ningún derivado de la palabra ‘royal’ en ningún territorio (ya sea dentro del Reino Unido o no) cuando se produzca la transición en la primavera de 2020”.
Muchos vieron esta respuesta como desafiante y fuera de lugar.
MÁS SOBRE ESTE TEMA: