“Su verdad tal vez no coincide con la mía”, con esta frase, César Morales, CEO del popular canal de YouTube Badabun respondió a las acusaciones en su contra que desde hace más de una semana formularon a través de redes sociales youtubers que trabajaban para la empresa.
Morales concedió una entrevista a Víctor González, quien también era parte del equipo del canal y aseguró que quería aclarar las acusaciones de acoso sexual y acoso, entre otras.
En una entrevista de más de una hora de duración, afirmó que todo lo que hizo lo tenía que hacer como cabeza de la empresa, que jamás acosó a nadie y que el contrato no obligaba a nadie a grabar cosas que no quisieran, pero que si querían ganar más en los videos tenían que trabajar más.
“Chicos, sería bueno que lo admitieran que todo lo que dijeron lo inventaron, y con mentiras no se llega a nada; tienen que ser honestos y decir la verdad. Si existe algún delito los invito a ir ministerio y denunciar”, aseguró.
Sobre la acusación en el sentido de que buscaba apropiarse de por vida del nombre de los youtubers que trabajaban en la empresa, aclaró que según los términos del contrato, ellos podían dejar de trabajar en la compañía en el momento que quisieran y que las regalías se repartían en un 50-50, “se me hace una falta de respeto que digan que los explotábamos cuando en otras personas sí lo están, ellos decían cuántos videos hacían a la semana, pues así era la ganancia y estaban conscientes”, aseguró y expresó que “no tienen madre”, ya que percibían ganancias superior a los 100,000 pesos mensuales.
Expresó que desde hace un mes había cambios en modelo de trabajo, en el que no querían incluir a los youtubers. “Todo cambió, de dos a tres meses dejó de ser un buen negocio, por los cambios que tuvo la plataforma YouTube”.
Afirmó que las amenazas por parte de los ex trabajadores de la empresa fueron más allá “en ese video que hicieron le pusieron precio a la cabeza de mi hija y me preocupé por mi familia”.
Afirmó que esa amenaza lo obligó a cambiar distintos aspectos de su vida personal y familiar para evitar cualquier riesgo a su persona o a su familia. Aseguró que continuamente lo atacan porque “no respondo”.
Explicó que, desde su punto de vista, nadie supo lo que realmente pasó y que a todos estuvieron de acuerdo en el tipo de los contratos en los que Badabun invertía el dinero, pero algunos llegaron a un punto en el que no eran rentables.
Afirmó que aunque es el socio mayoritario, no tiene el control de la empresa, pues sólo tiene el 35% de las acciones y los tenedores del resto se pronunciaron a favor de su destitución.
Aseguró que los cinco youtubers que denunciaron el hackeo de sus redes, se autohackeraon y afirmó tener conversaciones con ellos que lo demuestran, además que desde sus correos personales borraron sus videos del canal “pero pudimos recuperarlos”.
“Pudimos haber platicado de todo lo que ellos dicen que les pasó, pero inventar que fueron hackeados, que les robamos sus redes, es es muy bajo… acudan a ministerio público, dejen de mentirle a su gente”, señaló.
César Morales confesó que está desempleado y que quiere que todo pare por salud mental; por otra parte, el CEO hizo una demanda por difamación a Kevin Achutegi, Álex Flores, Kim Shantal, Queen Buenrostro y Dany Alfaro.
“Esto que empezó como un juego de ustedes ya está alcanzado otros niveles, ya está tocando muchos delitos” y exhortó a que si tienen pruebas sobre casos de acoso sexual, lo mejor era presentarlos al ministerio público.
Afirmó que a sus antiguos empleados no se les entregó contrato para evitar que se filtrara a otros medios de comunicación.
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