Una de las estrellas de “Keeping Up With The Kardashians”, Kylie Jenner, solicitó una orden de restricción contra un hombre que logró llegar a su mansión de Hidden Hills el pasado martes.
El hombre de 22 años y cuya identidad no fue revelada, arribó a la comunidad cercada caminando y consiguió pararse en la entrada de la casa de Jenner. Cuando llegó a la puerta principal, el hombre “golpeó agresivamente” la puerta y afirmó que estaba ahí para visitar a la modelo.
No obstante, un miembro del equipo de seguridad de la empresaria actuó con velocidad y logró sacar al joven de la propiedad antes de que la situación se agravara, después fue arrestado.
Según unos documentos presentados por el abogado de la empresaria, Shawn Chapman Holley, y obtenidos por el portal TMZ, el mismo guardia aseguró que el hombre actuaba de manera errática y nerviosa.
Fuentes de la fuerza policiaca dijeron al portal que el hombre tenía consigo una pipa de vidrio (normalmente se utilizan para el consumo de cannabis) y fue arrestado por estar “bajo la influencia”. Más tarde, el hombre fue acusado oficialmente de 2 cargos, incluido un delito menor de intrusión al conducir en propiedad privada, y un delito grave por traer contrabando a la cárcel (la pipa de vidrio).
Por ahora, el hombre no podrá acercarse a menos de 100 yardas (91 metros) de Jenner, así como de sus casas, sus automoviles y su lugar de trabajo.
Según los documentos, ni Jenner ni su hija Stormi Webster se encontraban dentro de la comunidad en el momento del incidente, sin embargo tiene miedo de estar en su propio hogar.
“Sufrí y continúo sufriendo estrés emocional. Tengo una pequeña hija y también temo por su seguridad”, declaró en los papeles en los que también aseguró que el hombre la sigue a ella y a otros miembros de su familia en diferentes redes sociales.
El hombre tendrá una audiencia que está programada para el 20 de noviembre. Por el momento la menor del clan Kardashian-Jenner no se ha pronunciado al respecto.
Historial de invasión
Kylie Jenner no ha sido la única hermana que ha sufrido una invasión a su privacidad, ya que su hermana Kendall también solicitó una orden de restricción en contra de un acosador.
Pero la más grave de las situaciones le sucedió a la más popular de las hermanas, Kim Kardashian. En octubre 3 de 2016, durante una visita a París, la personalidad de TV sufrió un robo en el que fue maniatada y amordazada, además fue amenazada con un arma de fuego apuntada a su cabeza.
Los ladrones se llevaron millones de dólares en joyería, pero lo que más buscaban era su anillo de compromiso.
“Era la semana de la moda de París, yo había mostrado mi nuevo anillo de diamantes. Kanye me había comprado un anillo de 20 quilates, además traje todas mis joyas, todo lo que tenía a París”, dijo Kim Kardashian en un entrevista para el programa “True Hollywood Story”.
“Kim y yo fuimos al show de Givenchy a ver a Kendall caminar en la pasarela y luego regresamos para cambiarnos para salir en la noche, y Kim decidió quedarse”, declaró Kourtney, la hermana mayor.
“En el momento en el que me estaba quedando dormida escuché a gente subiendo las escaleras. Querían mi anillo y mis joyas, así que no me peleé, sólo les di lo todo y me amarraron. Me pusieron cinta adhesiva sobre mis ojos y boca, fue lo más aterrador que he pasado en toda mi vida, pues pensé que estaba a punto de morir, sólo te estás preparando para el momento en el que van a disparar y matarte. Esos 10 minutos realmente cambiaron toda mi vida”, explicó Kardashian West.
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