Angélica Rivera quizás pensó que una vez terminado el mandato presidencial de Enrique Peña Nieto podría, por fin, alejarse de los reflectores bajo los que estuvo durante los seis años del régimen de su esposo y en los que no se salvó de las críticas por el escándalo de la “Casa Blanca” (una propiedad de unos USD 7 millones que aseguró haber comprado con el dinero que obtuvo durante sus años de trabajo como actriz en Televisa).
Pero lo que seguramente no esperaba “La Gaviota” era que aún seguiría estando bajo el escrutinio público e involucrada en escándalos casi un año después de que Peña Nieto dejara de ser presidente de México.
El primer “golpe” llegó semanas después de que comenzara el gobierno de Andrés Manuel López Obrador. Si bien es cierto que los rumores de un distanciamiento entre Rivera y Peña Nieto venían circulando en los últimos tiempos del mandato presidencial, la publicación de unas fotografías del ex presidente mexicano paseando por España con la modelo Tania Ruiz pusieron a la actriz y al político en medio de una ola de comentarios y especulaciones.
No pasaron muchos días antes de que Rivera publicara en cuenta de Instagram (ahora ya desaparecida) un mensaje para anunciar su decisión de divorciarse de Enrique Peña Nieto. Se dijo poco después que la actriz le exigía al político para concretar la separación viajes en vuelos privados para toda su familia y autos de lujo.
Sin que se confirmara esa versión, lo cierto es que para inicios de mayo estaban oficialmente separados, como el propio Peña Nieto lo dio a conocer también a través de un mensaje en su cuenta de Instagram.
Parecía que, ahora sí, Angélica podría dedicarse a descansar y preparar su regreso a la tv. Pero incluso ese tema resultaría complicado pues, según algunas versiones, su vuelta a Televisa no sería tan fácil ya que la empresa no deseaba relacionarse con ella por los problemas de imagen que tuvo con el tema de la Casa Blanca. Varios expertos recomendaron a la actriz que probara con papeles de villana y con proyectos en el extranjero para que recuperara de poco su peso en las telenovelas.
Sin embargo, la actriz no ha concretado ningún proyecto y en julio sufrió un “accidente casero” (como lo denominó su hija Sofía) por el que tuvo que ser sometida a una cirugía plástica. Hasta ahora se desconocen los detalles detrás del incidente, pero una revista aseguró que Rivera había consumido bebidas alcohólicas y se resbaló en las escaleras, lo que le habría provocado serias lesiones en el rostro.
Y apenas unos días después se supo de un intento de robo al interior de su casa en Lomas de Chapultepec, en donde los ladrones se enfrentaron a la policía. Jesús Orta Martínez, titular de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la CDMX, aseguró que ocho personas estarían implicadas en el intento de robo, ocurrido alrededor de las 11:30 de la noche del jueves 18 de julio.
Por esas mismas fechas la actriz enfrentó una pérdida familiar: la muerte de su abuelo y en medio de aquellas dificultades llegó a los 50 años rodeada por sus hijas.
Rivera volvió a ser noticia cuando se dio a conocer que en los últimos años del mandato presidencial de Peña Nieto, ella dormía en otra “Casa Blanca” al interior de Los Pinos, lo que dejaba ver el distanciamiento entre ambos.
“En los últimos años del sexenio de Peña Nieto el Presidente de México NO compartía la misma alcoba con su esposa Angélica Rivera”, señaló el portal Cuna de Grillos.
Además, la celebración del primer Grito de Independencia por parte de López Obrador hizo de nuevo recordar a Peña Nieto y Rivera por los lujos alrededor de la celebración.
Rivera solía aparecer en los Gritos con costosas prendas que no bajaban de los 20 mil pesos mexicanos, mientras que Beatriz Gutiérrez Müller optó por un vestido de una marca mexicana que le obsequiaron.
Y con la llegada de un nuevo mes también llegó una nueva polémica para la actriz, pues fue involucrada en una lista de personas a las que les fue condonado el pago de impuestos por parte del Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Durante el sexenio de Felipe Calderón y la mitad del sexenio de Enrique Peña Nieto el SAT condonó 247,600 millones de pesos a más de 7 mil contribuyentes, entre los que está Rivera.
Según la investigación de Fundar, la actriz dejó de pagar más de 1.7 millones de pesos en impuestos.