Este lunes 16 de septiembre, el reconocido cantante español Camilo Sesto habría cumplido 73 años. Sin embargo, cuando le faltaba sólo una semana para apagar las velas, sufrió un fallo renal y murió en un hospital de Madrid a la edad de 72, ante el pasmo de sus fans, que quedaron desolados.
Un día después de su pérdida, músicos, seguidores, periodistas y famosos del mundo del espectáculo le rindieron homenaje en una emotiva capilla ardiente. Y ahora, después de llorarle, sus admiradores volvieron a honrar la memoria del cantante por su aniversario de nacimiento. Y entre todas las palabras de afecto, no podían faltar las escritas por su mayor fan, su único hijo, Camilo Blanes.
Camilín, como le conocen en España, viajó desde México a Madrid para darle a su padre el último adiós. Y aunque desde entonces, por su carácter introvertido y sensible, le ha costado trabajo hablar abiertamente de sus sentimientos hacia su padre, no perdió la oportunidad de hacerlo en el que habría sido su cumpleaños número 73. A través de su cuenta de Facebook, dedicó un tierno mensaje a Camilo Sesto, y aseguró que un padre como él "nunca se olvida".
"FELIZ CUMPLEAÑOS PAPÁ. Te felicito aunque no pueda hacerlo en persona, pero sí en el espíritu que compartimos. Mi agradecimiento hacia ti por todo es infinito y aún así… no le hace justicia… Te lo digo con el corazón en la mano", escribió Blanes junto a la fotografía que subió a la red social.
"Sé que me puedes ver, escuchar, y que sigues conmigo y seguirás siempre. Un padre como tú no se olvida jamás. Ni en vida… ni en lo que viene después… Tú eres todo en mí, y yo soy un reflejo de ti. POR SIEMPRE………", concluyó.
Los familiares y seres queridos de Camilín lo han descrito como un joven "desapegado de las cuestiones materiales". Siempre idolatró a su padre y quiso seguir sus pasos en el mundo de la música. "Lo admiro, y lo admiraré siempre", dijo a la salida del velorio a los reporteros que le esperaban.
Blanes se encuentra todavía en España, donde pronto se leerá el testamento de su padre y se sabrá si él es el heredero universal. El cantante poseía dos grandes residencias en zonas exclusivas de Madrid, y además dos sociedades, aunque según declaró a Milenio Televisión la periodista mexicana Lourdes Maldonado, -amiga de Camilo Sesto-, la segunda empresa habría cambiado de titularidad y sería hoy propiedad de uno de sus administradores.
"Durante mucho tiempo [Camilo Sesto] tuvo su propia empresa, Camilo Ediciones. Estaba registrado él como único administrador ante las instancias correspondientes en España; sin embargo, desde hace unos años, y te lo digo porque yo vi los papeles, la empresa ya no estaba a su nombre. Está a nombre de una de las dos personas que manejaban su carrera", contó la reportera de espectáculos mexicana.
"Camilo Ediciones es el propietario del nombre de Camilo Sesto y de las regalías y títulos de sus canciones. Yo dudo que su hijo esté dispuesto a entrar en un litigio por esto, porque es un chico muy desapegado de las cuestiones materiales", añadió Rocío Maldonado.
De acuerdo a ley española a Camilín le corresponden mínimo dos tercios del legado de su padre. El resto podría quedar en manos del equipo de trabajo del artista español. Su secretario y su administrador fueron las personas más cercanas a él en sus últimos meses de vida, dos personas que, contó Maldonado, tienen una mala relación con la ex pareja de Camilo Sesto, Lourdes Ornelas, y con su hijo, Camilo Blanes.
"Te puedo decir que la relación de Lourdes Ornelas y Camilo hijo no es óptima con los administradores de Camilo Sesto; cuando les notificaron que había fallecido pidieron un boleto de avión para viajar de inmediato y el administrador no quiso dárselos, por eso Lourdes salió el lunes a España", explicó Maldonado.
A pesar del mal estado de salud del intérprete de "Vivir así es morir de amor", dijo la periodista, sus trabajadores continuaron organizando shows y cobrándolos por adelantado. Lo hicieron a espaldas del artista, sin su consentimiento.
"Desde febrero estuvieron anunciando una gira, pero su estado de salud ya era pésimo, él no sabía que estaban vendiendo fechas y las estaba vendiendo su gente, estaban cobrando 120.000 euros de adelanto por cada show. Lo cierto es que Camilo Sesto tenía mucho tiempo enfermo, se sabía que no podía hacer esa gira. Cuando se enteró dijo: 'Ya no puedo trabajar más', enfureció, pero la gira se siguió armando y su gente subía fotos a redes que ni siquiera eran de este año".