La actriz estadounidense Lea Michele compartió en su cuenta de Twitter una fotografía para recordar a Cory Monteith, el actor que fuera su compañero en Glee y también su pareja sentimental, que falleció hace seis años a consecuencia de una sobredosis.
En la red social, Lea publicó el sábado por la tarde una fotografía de un paisaje del mar y las nubes, que acompañó con la frase "la luz siempre permanece", lo que de inmediato se interpretó como su homenaje a Cory, pues el año pasado ya había recordado al fallecido actor con una frase similar.
"Hay algunos que traen una luz tan grande al mundo que incluso cuando se han ido, la luz permanece", escribió entonces Lea.
Su publicación más reciente en Twitter registró casi 80.000 "me gusta" y más de 12.000 "retuits". En los comentarios que recibió abundaron las imágenes que recordaban sus escenas románticas en la serie.
La actriz y Monteith eran figuras reconocidas gracias a la serie Glee, pero los demonios en la vida del actor (en específico su consumo de drogas) terminaron por provocar una tragedia.
El 13 de julio de 2013 Monteith fue encontrado muerto en un hotel de Vancouver donde se hospedaba. Falleció a consecuencia de una sobredosis de heroína y alcohol, a los 31 años.
Apenas en abril de ese año el actor había salido de una clínica de rehabilitación a donde él mismo se internó por su abuso de sustancias.
Según la investigación de la Policía, Monteith había salido de fiesta con algunos amigos la noche anterior y por la madrugada regresó solo a su habitación.
Las sospechas se desataron cuando el actor no se presentó a entregar su habitación y personal del hotel acudió al cuarto cerca del mediodía.
Un par de años antes, el actor había hablado de su difícil infancia y adolescencia. "Tengo suerte en muchos aspectos, tengo suerte de estar vivo", declaró el actor canadiense a la revista Parade.
Los padres de Monteith se divorciaron cuando él tenía siete años, Cory faltaba constantemente a la escuela y a los 13 años comenzó a consumir drogas.
"Estaba fuera de control", reconoció el actor, a quien se le puso un ultimátum después de robar dinero a un pariente para comprar drogas: enmendaba su vida o terminaría en la cárcel.
"Finalmente dije: 'Voy a empezar a mirar mi vida y averiguar por qué estoy haciendo esto'".
Cory cambió de rumbo, tuvo diversos trabajos como el de taxista y después probó suerte en la actuación, hasta que le llegó su gran oportunidad con Glee en 2009.