La familia de Edith González no esperaba que el último ingreso de la actriz al hospital resultara fatal, pero cuando supieron que el sistema inmunológico había cedido, llegó la hora de despedirse de ella, quien nunca perdió su fuerza y valentía, recordó su hermano.
"Estábamos confiados", aseguró Víctor Manuel González -hermano de la actriz- durante una entrevista al programa Ventaneando, en la que también leyó una carta de despedida que escribió Constanza, la hija de Edith.
Según Víctor, parecía que todo marchaba bien con la actriz, a quien le fue detectado cáncer de ovario en 2016, pero que un año después aseguró que la enfermedad estaba controlada.
El hermano de Edith destacó el hecho de que la actriz este año llegó a combinar su trabajo teatral en la obra Entre mujeres y en el programa de tv Este es mi estilo, por lo que no había síntomas de que algo malo ocurriera.
Lo único que llegó a comentarle Edith a su hermano fue que se sentía un poco cansada y quizás tendría que encaminar su carrera hacia otro rumbo.
Sin embargo, la tragedia llegó a la familia González cuando Edith comenzó a tener algunos problemas de salud. "Sentía un leve dolor en la espalda y oclusión intestinal, no podía metabolizar, por eso se recurrió al hospital", explicó su hermano.
Destacó el hecho de que Edith "estaba entera, entró con una sonrisa al hospital" y, sobre todo, la manera en que reaccionó al enterarse de que su sistema inmunológico había cedido y no se podía hacer mucho más por ella.
"A mí me apantalló. La manera de enterarse y decirle al doctor (adiós, con un gesto de la mano y una sonrisa). Fue impresionante. Te puedes ir con lágrimas o te puedes ir con 'dios, ¿por qué yo?' Nada", detalló.
De acuerdo con Víctor, los doctores les comentaron que había posibilidades de aplicar una nueva quimioterapia "para quitar un problema de ganglios que se adhirieron al intestino", pero luego hubo otras complicaciones. "El problema fue el sistema inmunológico".
En la plática con Ventaneando, el hermano de Edith habló de cómo la actriz siguió apoyando otras causas aun en medio de su enfermedad.
Recordó quepues le preocupaban sobre todo los niños que reciben atención ahí.
Hacia el final de la plática, Víctor quiso decir una frase que su hermana solía repetir y que fue como un lema para ella: "hay que amar la vida".
Entre toda la información que ha surgido tras el deceso de la actriz, se supo que pidió a su familia que la desconectaran cuando ya no hubiera más que hacer pues quería "irse en paz". También quería ser despedida en el Teatro Jorge Negrete de la Asociación Nacional de Actores (ANDA) y que le llevaran mariachis, tal como ocurrió.