Madre, actriz y bailarina, Edith González falleció a los 54 años por cáncer de ovario. Pero la huella que dejó en el mundo del entretenimiento es muy amplia.
La regiomontana llegó desde muy temprana edad a la Ciudad de México con el sueño de convertirse en actriz y pertenecer al mundo del espectáculo. Su madre, Ofelia Fuentes, la llevó al programa Siempre en domingo para que lo presenciara desde el público. Así, su hija podría descubrir si realmente esa era la vida que quería llevar.
Edith González, con tan solo cinco años llamó la atención de uno de los productores, que habló con la niña y su madre. Para fortuna de ambos, el funcionario de Televisa buscaba a una niña que interpretara un papel en la obra de teatro Los Miserables. Sin titubear, la pequeña rubia de ojos azules aceptó la propuesta, comenzando, así, su carrera como actriz.
Muy pronto captó la atención de más miembros de la televisora, quienes la llamaron para participar en diversos teleteatros. Algunos de ellos fueron El rey de los gorilas, en 1976, Pero sigo siendo el rey, en 1988, Central Camionera, el mismo año, y Los cómplices del infierno, en 1994.
Pero su talento no se limitó a las puestas en escena. Mientras actuaba en las obras, también trabajaba en telenovelas de Televisa. La primera producción importante en la que participó fue en Los ricos también lloran, en donde hizo el rol de María Isabel, una niña adoptada por los protagonistas de la historia, la actriz Verónica Castro y Rogelio Guerra.
Desde entonces su aparición en la pantalla chica fueron frecuentes. En toda su vida realizó 36 telenovelas; de las que la más emblemática en su carrera fue Salomé, realizada en 2001, justo en la cúspide de su carrera.
Fue producida por Juan Osorio, y en ella, Edith González, la protagonista, representa a una bailarina exótica que trabaja en el cabaret D'Rubí. Ella y una de sus amigas se encuentran con un acaudalado amigo, que la lleva a conocer a su cuñado, Julio Montesin. Salomé se enamora de él y comienza un trío amoroso.
La vida lleva a la protagonista a mudarse a Juárez, en donde se convierte en una exitosa empresaria, madre de un hijo propio y dos adoptivos, pero las situaciones de la vida la hacen regresar a su ciudad, en donde enfrenta su pasado y resuelve los problemas que quedaron pendientes.
Al mismo tiempo que exploraba la actuación, Edith González también se preparó en la danza clásica y en el canto, otras dos de sus grandes pasiones. Aunque nunca grabó un disco, sí participó en programas de televisión interpretando canciones.
En 1998, la regiomontana se convirtió en la primera Aventurera, producción teatral de Carmen Salinas, en la que tomó el papel de una mujer seductora y posesiva. Repitió el papel en 2007. Ha sido elegida por la audiencia como una de las mejores actrices que interpretó el rol. Después de ella, Niurka Marcos, Ninel Conde y Susana González.
Fue en 2004 cuando la ya muy querida actriz se embarazó de su hija Constanza. No se supo que Santiago Creel, el político panista, era padre de la pequeña hasta cuatro años después, ya que su relación con Edith González se mantuvo en secreto. El entonces secretario de gobernación estaba casado con Beatriz Garza Ríos.
Su maternidad no detuvo su carrera como actriz. En 2006 continuó participando en producciones para la pantalla chica, como Mundo de fieras y Palabra de mujer. Dos años después, interpretó otro de los papeles más importantes en su carrera: Doña Bárbara.
La historia la grabó en Telemundo, por lo que tuvo que dejar México y mudarse a Colombia durante algunos meses. Después volvió a su país. para tener algunas apariciones en series y telenovelas.
En octubre de 2010 la actriz, que siempre había estado en la misma televisora, cambió a Televisa, y un año después, protagonizó la telenovela Cielo rojo. Continuó con su carrera en la televisión hasta el año 2016, en que le fue detectado cáncer de ovario.
Ese mismo año contrajo matrimonio con Lorenzo Lazo, con quien estuvo casada hasta su fallecimiento.
Desapareció temporalmente del mundo del espectáculo para enfrentar su enfermedad. En junio de 2017 declaró que ya había sido controlado. Después de su declaración volvió al teatro y comenzaron rumores acerca de su regreso a Aventurera, pero nunca se concretó.
El cáncer volvió al cuerpo de Edith González, quien falleció en la madrugada.