El 19 de abril de 1989, todo cambió para siempre en la vida de Antron McCray, Kevin Richardson, Yusef Salaam, Raymond Santana y Korey Wise, cuatro adolescentes afroamericanos y un hispano de Harlem, que estaban en el momento erróneo en el lugar equivocado. Esa noche, Trisha Meili –una joven blanca que corría en la parte norte del Central Park -sería brutalmente golpeada y violada.
La policía de Nueva York, presionada para encontrar con rapidez a los responsables, convirtió a los cinco chicos, menores de 16 años, en los principales sospechosos del atroz hecho que no cometieron. Fueron condenados injustamente por la violación y enviados a prisión.
En el año 2002 sus condenas fueron revocadas, cuando un asesino y violador en serie Matías Reyes confesó haber sido el único autor del crimen y su ADN coincidió con el hallado en todo el cuerpo y la ropa de la víctima.
El caso revivió gracias a Así nos ven (When They See Us), una miniserie de cuatro episodios de Netflix, que se estrenó el 31 de mayo, obra de la directora Ava DuVernay, que tiene como objetivo profundizar en esta historia real que expone los peligros del racismo en el sistema policial y judicial que en ese entonces llevaron a la culpabilidad de "Los cinco de Central Park", como fueron llamados por la prensa.
Duvernay, que ya tocó el racismo institucionalizado en su documental, Enmienda XIII, también para Netflix, examina el papel que jugaron las razas y el origen humilde de los menores en su incriminación y encarcelamiento y el efecto que las condenas erróneas tuvieron sobre ellos y sus familias. "Mi objetivo es invitar a la audiencia a que se pregunten: '¿Qué ves cuando ves a niños negros?'".
El brutal ataque a Meili -una empleada de un fondo de inversiones de Wall Street de 28 años- se convirtió en uno de los casos policiales más mediáticos de finales de la década de 1980. Ed Koch, alcalde de la ciudad, afirmaba que era el "crimen del siglo". Incluso el actual presidente de los EEUU, Donald Trump, solicitó -en los diarios del país- la pena de muerte para Antron, Yusef, Korey, Raymond y Kevin.
Después de que la Justicia de Nueva York anunciara la inocencia de los jóvenes, ya hombres, Trump escribió un artículo de opinión en el diario New York Daily News. Llamó la absolución como "una vergüenza" y afirmó que la culpabilidad del grupo aún era probable.
La miniserie, que recibió elogiosas críticas por su estilo narrativo y las excelentes interpretaciones, fue coproducida por Oprah Winfrey y ha reabierto el debate sobre el racismo en el seno de la policía y el sistema judicial de Estados Unidos. La prensa especializada definió el drama como un retrato real de una injusticia que fue producto del odio y la intolerancia que aún hoy impera en la sociedad americana.
La noche en que todo sucedió
A última hora de la tarde del 19 de abril de 1989, un grupo de aproximadamente 30 jóvenes afroamericanos y latinos entraron al Central Park, cerca de Harlem, para cometer actos de vandalismo. Al mismo tiempo, Meili corría cerca de allí cuando fue derribada y arrastrada 90 metros. Luego, la pesadilla continuó: fue violada múltiples veces y golpeada brutalmente. Su agresor la dejó allí, cubierta de sange, desnuda y casi muerta.
Unas cuatro horas más tarde, dos personas encontraron su cuerpo, tapado de hojas y barro, en un barranco. Había perdido tanta sangre que sus médicos creían que no iba a sobrevivir y su cráneo había sido golpeado hasta fracturarlo. Cuando despertó tras permanecer en coma durante 12 días, no recordaba nada del feroz ataque.
La Policía de Nueva York actuó de inmediato y asumió que los adolescentes detenidos por los estragos en el emblemático parque de Nueva York también fueron responsables de la violación e intento de homicidio de Meili. En ese grupo se encontraban Antron McCray, Yusef Salaam, Korey Wise, Raymond Santana y Kevin Richardson, que para ese entonces solo dos de ellos se conocían, y, según sus testimonios, se habían unido a la pandilla por casualidad.
Inicialmente, iban a ser acusados de disturbios, pero la jefa de la unidad de delitos sexuales de la fiscalía de Manhattan, Linda Fairstein, determinó sin pruebas y con la necesidad del cerrar el caso que ellos eran responsables de la violación y construyeron el caso alrededor de la culpabilidad de los cinco menores.
Fueron interrogados durante horas y horas por los agentes hasta que "confesaron" haber participado en la violación y golpiza a Trisha. ¿Sus edades? Entre 14 y 16 años. Pero a pesar de que en el juicio declararon que habían sido forzados a mentir, no les creyeron. Tampoco tuvieron en cuenta un informe del FBI que decía que las pruebas de ADN sobre el cuerpo de Meili y un calcetín con el semen del agresor no coincidían con los registros de los sospechosos.
La serie muestra cómo los policías no solo interrogaron a algunos de estos menores de edad sin la supervisión de sus padres ni un representante legal, sino cómo los maltrataron y los obligaron a cada uno de ellos a culpar a otros de los detenidos.
Sin embargo, Farstein, prolífica autora de novelas policíacas en la actualidad, defiende que los interrogatorios se realizaron con absoluto respeto de los derechos de los jóvenes y según establece la ley.
En el drama de Netflix también se puede ver cómo Farstein y los agentes forzaron el relato temporal de los hechos para que los menores estuviesen cerca de la escena del crimen. Incluso ocultaron evidencias que demostraban la inocencia de los adolescentes.
Dos juicios, todos culpables
Las acusaciones se basaron casi exclusivamente en lo que habían declarado a la policía, ya que su ADN no coincidía con el encontrado ni en la víctima ni en el escena del crimen. El proceso legal contra los jóvenes se dividió en dos juicios: uno contra Antron McCray, Yusef Salaam y Raymond Santana; y el otro contra Kevin Richardson y Korey Wise. Este último fue el único que fue juzgado como adulto por tener 16 años.
La declaración de uno de los expertos que aseguró que el semen encontrado correspondía a otra persona, la fiscalía les ofreció un acuerdo por el que los jóvenes debían reconocer su culpabilidad para recibir una sentencia menor. Ellos rechazaron la propuesta y los juicios siguieron adelante.
En el primer juicio, celebrado en agosto de 1990, Yusef, Antron y Raymond fueron exculpados de intento de homicidio, pero fueron condenados por violación, asalto, robo y disturbios. Recibieron la máxima sentencia para menores: entre cinco y diez años en un correccional.
El segundo juicio terminó en diciembre de 1990. Kevin fue condenado por intento de homicidio, violación, asalto y robo, y su sentencia fue también de cinco a diez años en un correccional. Korey fue exculpado de esos cargos, pero fue condenado por abuso sexual, agresión y disturbios, y recibió una sentencia de cinco a 15 años en una prisión para adultos por tener 16 años.
Finalmente, todos pasaron en prisión entre seis y trece años.
La víctima testificó en ambos juicios, pero dijo no recordar nada desde el momento en que salió de su casa para trotar hasta que despertó del coma en el hospital.
Inesperado giro del caso
En 2001 un violador en serie que estaba encarcelado en el mismo centro que Korey Wise confesó que él había agredido a Trisha Meili y la había dado por muerta.
Matías Reyes, que cumplía cadena perpetua por otras violaciones y un asesinato, les contó a las autoridades cómo realizó el ataque e insistió en que actuó solo. Su ADN coincidía en más del 99% con el hallado sobre el cuerpo de Meili y en el calcetín encontrado en la escena del crimen.
La confesión supuso la liberación en 2002 de Wise, el último de los cinco que quedaba en prisión.
En cuanto se conoció la culpabilidad de Reyes se inició un proceso legal y los cinco de Central Park, ya adultos, fueron exonerados y en 2014 – tras más de diez de años de una batalla judicial- recibieron una indemnización de USD 41 millones de la ciudad de Nueva York.
"Así nos ven"
DuVernay trabajó estrechamente con Kevin, Antron, Yusef, Korey y Raymond en el proyecto. Fue Santana quien se puso en contacto con la cineasta, que en 2014 había dirigido la premiada película Selma, para proponerle que contara su historia.
Marquis Rodriguez, Ethan Herisse, Asante Blackk y Caleel Harris, son todos actores desconocidos y, en algunos casos, hasta debutantes, con la excepción de Jharrel Jerome, que llamó la atención de Hollywood por su participación en Moonlight.
Entre los personajes adultos sí hay caras mucho más familiares como Vera Farmiga, Michael K. Williams, Joshua Jackson, Vera Farmiga, John Leguizamo y Felicity Huffman.
Para DuVernay, es importante denunciar que lo que se muestra en la miniserie "sigue sucediendo, a pesar de que han pasado 30 años del caso".
El estreno de la miniserie desencadenó una campaña de boicot a los libros de la ex fiscal tras la avalancha de críticas al rol que jugó en la condena de los menores.