El empresario Emiliano Salinas, quien enfrenta un escándalo por sus vínculos con la secta Nexivm, reapareció en redes sociales gracias a un mensaje de amor que le dedicó su esposa, la actriz Ludwika Paleta.
Hasta ahora, la actriz había mantenido un bajo perfil, pero el fin de semana compartió una foto boomerang en la que se le ve dándose un beso con Salinas. Para acompañar su publicación, Ludwika escribió a su esposo "Te amo", aunque -como en el resto de sus publicaciones- bloqueó los comentarios.
Antes de esa publicación, Ludwika había publicado la semana pasada algunos mensajes vía Instagram stories que fueron vistos como la respuesta de la actriz a la polémica de su esposo.
"¿Tú cuidas lo que comes? Ok… entonces cuida lo que lees, lo que comes, lo que dices, ¿no crees? #cuestiona, #pregunta, dale el beneficio de la duda a TODO lo que lees", escribió Paleta.
Los mensajes de Ludwika llegaron días después de que el nombre de Emiliano Salinas fuera mencionado por la fiscalía en el juicio que se sigue contra Keith Raniere, líder de la secta Nexivm.
Raniere está acusado de tráfico sexual, esclavitud, trabajo forzado y privación de la libertad.
El hijo del ex presidente mexicano Carlos Salinas de Gortari fue señalado pro la fiscalía como "co conspirador", pues lo acusaron de crear varias cuentas de correo electrónico empleadas para desacreditar a los enemigos de la organización.
En la secta Nexivm, las mujeres eran obligadas a tener sexo con Raniere y eran marcadas en la zona pélvica. Más de cien mexicanos han figurado entre los integrantes de la organización, como las hermanas Jimena, Carola y Loreta Garza Dávila y Rosa Laura Junco de la Vega, hija del principal accionista de Grupo Reforma.
Salinas fue uno de los principales impulsores del grupo Nxivm en la capital mexicana. En 2007 la organización abrió el primer centro en el país en el que ofrecía sus programas de Éxito Ejecutivo (PEE y ESP por sus siglas en inglés) para empresarios y líderes.
Ante el escándalo que enfrenta, Emiliano Salinas publicó un comunicado el pasado 23 de mayo en el que se deslindó de cualquier vínculo con Raniere.
"Durante el periodo de mi asociación comercial con la empresa NXIVM, jamás participé o estuve involucrado de forma alguna con DOS y, como se ha revelado en la propia cobertura del caso, sus integrantes siempre negaron la existencia de las prácticas que hoy se conocen sobre el grupo. Cuando a principios de 2018 una conocida involucrada en DOS decidió relatarme sus experiencias, renuncié y corté de manera inmediata cualquier tipo de contacto con NXIVM; esto con una profunda consternación por las atrocidades que escuché".