Para desfilar por la alfombra rosa de la MET Gala es necesario una invitación de Anna Wintour o pagar USD 30.000, aunque algunos famosos pusieron más esfuerzo que otros y deslumbraron con los atuendos más extravagantes de la noche.
Serán recordados celebridades como Harry Styles y Lady Gaga, quien convirtió su paso ante los fotógrafos en un performance de 15 minutos en el que se cambió en 4 ocasiones.
Desde la calle 84 y Madison hasta los escalones del Museo Metropolitano de Arte, Lady Gaga desfiló con cinco bailarinas, su maquilladora y su fotógrafo personal en una brillante actuación en vivo que comenzó con ella luciendo un vestido fucsia neón con una cola de siete metros y medio de largo y un moño de lazo en la cabeza. Se quitó las prendas hasta quedar en lencería.
Con siete ojos y una máscara de sí mismo, Ezra Miller fue uno de los que más llamó la atención, gracias a su atuendo a cargo de Riccardo Tisci, director creativo de Burberry, inspirado en El Fantasma de la Ópera.
Inspirada en la obra de Piccaso y Dalí, Alexandra Mandelkorn trabajó con más de 15 opciones hasta llegar al look con el que Janelle Monae apareció con una torre de sombreros y un ojo tapando uno de sus senos.
En un traje rojo con joyas plateadas de Gucci, Jared Leto llevó una réplica tamaño real de su cabeza haciendo honor al desfile otoño/invierno 2018 de la firma de lujo.
Sin perder su estilo, Céline Dion apostó por un diseño de Oscar De la Renta inspirado en Judy Garland. Algunos la compararon con Cher.
Hamish Bowles, uno de los editores de Vogue, llamó la atención con plumas y una capa de Maison Margiela, un traje violeta y el cabello teñido de turquesa, verde y amarillo.
La cantante Katy Perry nunca defrauda. Esta vez se convirtió en un candelabro viviente a su paso por la alfombra rosa.
Ya en el evento, Katy se convirtió en una hamburguesa, y así bailó y convivió con las celebridades durante toda la noche.
Kylie y Kendall Jenner provocaron memes por sus plumas y colores, aunque llegaron muy ad hoc a la temática estrafalaria de la noche.
A Cara Delevingne solo le faltó colgarse un perico en la cabeza, aunque reunió unos plátanos y mandíbulas para completar su look.
Donatella Versace combinó su atuendo con su cabello. Al parecer ella se sentía "divina", tal como decía su vestido.
Lupita Nyong'o fue de las últimas en llegar, y tal vez se le hizo tarde, pues desfiló con peinadores enterrados en el cabello. Seguramente eran parte de su estrafalario atuendo colorido.
Algunos usuarios de redes sociales criticaron la velada, al decir que no había muchos famosos relevantes. Además de que consideraron que algunos de los atuendos eran más que ridículos.