Kim Kardashian finalmente fijó su postura respecto del trastorno de bipolaridad que padece su esposo, Kanye West, por el cual experimenta cambios severos en su estado de ánimo.
"Creo que estamos en un buen lugar con eso por ahora. Es un proceso emocional, por seguro. Por ahora todo está realmente calmado", dijo a la revista Vogue.
Kim Kardashian abrió su corazón: "Para él, estar bajo medicación no es realmente una opción, porque eso solo cambia cómo es él. Viajar mucho lo desencadena, por lo que ya no viaja tanto como antes".
"Pero, honestamente, no quiero hablar por él, porque no estoy dentro de su mente", dijo antes de comentar que ha leído críticas en su contra por no hacer nada para ayudarlo."Como si fuera mi culpa si hace o dice algo con lo que no están de acuerdo. Ese es mi esposo, comparto cada opinión que tengo y le hago saber cuando algo está mal".
La empresaria dijo que cuando surge algún episodio bipolar trata de apoyarlo y calmar la situación.
Kanye lo considera su "superpoder"
En junio del año pasado, el rapero confesó que fue diagnosticado con una enfermedad mental a sus 39 años, pero que la consideraba un "superpoder".
En su cuenta de Instagram ha publicado mensajes que resumen su situación, y también lo expresó a través de su música, como en la canción "Yikes".
"Odio ser bipolar, es increíble", dice arriba de una imagen de las montañas de Wyoming.
El 30 de marzo se conmemoró el Día Mundial del Trastorno Bipolar, padecimiento que la Organización Mundial de la Salud (OMS) clasifica como la sexta causa de discapacidad en el mundo, que afecta a 60 millones de personas.
Se trata de una afección mental que se manifiesta con cambios marcados o extremos en el estado de ánimo.
Las personas con trastorno bipolar tienen un riesgo particular de desarrollar otras enfermedades al mismo tiempo. Dos tercios de las personas que lo sufren también pueden transitar trastornos de ansiedad y, más de un tercio, poseer un trastorno por uso de sustancias.
"Las personas que viven con el trastorno bipolar son más que su diagnóstico; que son capaces de vivir una vida plena y con éxito, a pesar de convivir con esta patología. Desafortunadamente, el estigma asociado al padecimiento continúa siendo una barrera a la atención e impide el diagnóstico precoz y la realización de un tratamiento eficaz", explicó a Infobae el doctor Horacio Vommaro, médico psiquiatra y jefe de Psiquiatría y Salud Mental de INEBA.