Tras la polémica que enfrentó con un sonidista la semana pasada en Panamá, el cantante mexicano Luis Miguel tendrá que realizar terapias auditivas profesionales en Los Ángeles, California.
Allegados al cantante informaron en exclusiva a Infobae sobre su estado de salud.
Un video que circuló la semana pasada mostraba al cantante molesto con el sonido en su show. Mientras interpretaba "Decídete" se quejó de la calidad en el sonido y arrojó un micrófono al sonidista. Después de eso comenzaron a discutir y un guardaespaldas tuvo que separarlos.
De acuerdo con la información obtenida por Infobae, la gente de Luis Miguel aseguró que lo del sonidista fue una agresión intencional, pues el ingeniero de sonido subió el volumen del sistema de monitores al máximo.
Desde hace tiempo se sabe que Luis Miguel padece una enfermedad incurable llamada tinitus o acúfenos, que provoca ruidos y zumbidos en los oídos y que lo puede llevar a la sordera.
"Es una situación complicada, pero tienen que pensar que yo empecé a los 9 años con esta carrera: con la música, los decibeles, los conciertos… Entonces son más de 30 años expuesto a sonidos muy fuertes. Tuve que pasar por un tratamiento y afortunadamente ya estoy mejor", dijo acerca de su enfermedad en una entrevista.
Luis Miguel dijo entonces tener controlado el asunto de su enfermedad, pero la periodista Claudia de Icaza -autora de una biografía sobre "El Sol"- señaló que al intérprete le "queda poco tiempo de carrera, porque tiene un problema muy severo en el oído, se está volviendo loco sobre el escenario porque tiene un zumbido de por vida. Tiene una voz extraordinaria, pero ha comenzado a tener mala afinación… Él se ocupó siempre de esos detalles porque ha sido muy perfeccionista, pero hoy ya está perdido en el escenario por la cuestión de su oído".
El incidente con el sonidista ocurrió en el Centro de Convenciones Amador de Panamá. No se dio a conocer la identidad del hombre agredido, pero se sabe que es estadounidense y trabaja para Luis Miguel desde hace un año.
También se dijo que está tan cansado de las agresiones del cantante que decidió denunciarlo.
A los espectadores del show no les gustó la actitud del cantante mexicano y lo abuchearon. Al parecer fue al final del concierto cuando el incidente pasó a mayores y tuvo que intervenir el guardaespaldas del intérprete, quien se encuentra viajando con su gira "¡México por siempre!", que también llevará a Estados Unidos.