El próximo reto de Yalitza Aparicio: diálogos en un contexto ajeno a su entorno

Yalitza significa "luz, poder e imaginación", y parecería que en el nombre llevaba su destino.  La mujer mexicana que ha resultado un fenómeno internacional, Yalitza Aparicio, suma hoy un hito al haber sido nominada al Oscar como mejor actriz, un hecho histórico para una película en español y para un personaje que habla mixteco en la cinta.

Este logro es apenas una muestra de la profunda transformación que ha sufrido de manera drástica la vida de la maestra rural de Tlaxiaco, del estado de Oaxaca, que se ha convertido en una celebridad.

Yalitza, hija de una mujer indígena triqui originaria de San Juan Copala, ha tenido la oportunidad de cambiar su historia y, con ella, la historia de muchas mujeres que eran invisibilizadas, mujeres que solo asumían un rol: ser empleadas domésticas en una familia en la que están presentes, pero que no representan nada.

El director Alfonso Cuarón ha hablado desde su sensibilidad y ha logrado que su historia toque miles de vidas, incluyendo la de Yalitza Aparicio, una mujer sin estudios actorales a la que se la ha criticado por aparecer vestida de Louis Vuitton y Prada para una portada en Vanity Fair, la protagonista de Roma que Hollywood Reporter ha colocado en su tapa con una vestimenta casual.

La misma joven que aparece vestida por Gucci en una alfombra roja y que Alfonso Cuarón defendió y enalteció por ser "la primera vez que una mujer de origen indígena está siendo nominada. Es maravilloso el trabajo que ha hecho Yalitza, y más aún que se la esté reconociendo".

Lo que es un hecho es que la película ha dado de qué hablar, "ya tenían muchos años que una película mexicana no generaba esta polémica", expresó.

"(El filme) está abriendo muchas cosas, que por fin el pueblo de México reaccione a una película mexicana, bien o mal, pero están reaccionando, se está hablando de estos temas, de estos Méxicos tan desiguales", refirió para Infobae México José Antonio Valdés, quien fuera director de la Cineteca Nacional durante 21 años.

"Es la representación de sus mujeres, en el México clasemediero, está jugando con esos dos Méxicos que nos tocan, lo que nunca va a estar junto, finalmente se conjuga gracias al cine".

Aunque ya la nominación hace que Yalitza desafíe la historia, la Academia estadounidense también está enviando un mensaje político en un momento en el que el presidente está buscando la construcción del muro fronterizo.

"El que Yalitza ganara el Oscar de mejor actriz, no solo premias a la actriz, sino que también al personaje, y sería un alfiler terrible en estas cuestiones que están provocándose en la Casa Blanca, entonces, más allá de la formación o no de Yalitza, si gana la Academia se está lanzando a una cruzada en contra de Donald Trump, que ahora nos beneficiaría" recalcó el crítico de cine.

Yalitza fuera de contexto

Alfonso Cuarón, quien peleó fuertemente cuando supo que Roma estaba subtitulada al castellano en España, se ha mantenido al margen al ver cómo a Yalitza se le ha dado la imagen a la que aspira Hollywood para ser aceptada en la industria.

"A Yalitza en un 90% de los casos se la ha sacado de contexto, por un lado alguien dice que se está abusando de su imagen, que obviamente no tiene nada que ver con lo indígena y están jugando este juego de querer modernizarla, querer 'encajarla' en algo donde finalmente sería más aceptada por todos".

"Y por otra parte, lo de Hollywood Reporter es más digno lo que hicieron con ella, de ponerla en un contexto mexicano, sencilla, platicando como ella lo hace . Los propios vestidos de gala que le hemos visto en las alfombras de entregas…, hay alguien ahí que no está entendiendo qué puede significar Yalitza Aparicio", añadió el crítico.

Añade que Alfonso Cuarón está envuelto en un discurso dual, en la vorágine en la que se ha convertido Roma, peleando por su película mientras otros visten a Yalitza y le "arrebatan" su cultura para imponerle la "aceptada" por esta industria.

Pero quién es y qué representa entonces en esta dicotomía, en estos Méxicos que se han representado desde la visión emocional y sensitiva de Alfonso Cuarón en Roma.

"Directores de teatro dicen que pasa cuando a estos personajes los sacas de su entorno y los haces que hagan una buena actuación porque los pones a interpretar personajes que están muy cercanos a su entorno. El señor de Ladrones de bicicletas era un desempleado interpretando a un desempleado".

"Es el caso de Yalitza, aunque tiene una educación profesional, estaba estudiando para unirse al magisterio. Pero seguramente por el entorno de donde viene conoce a muchas Cleo y puede absorber la experiencia y hacer este papel tan bello de una mujer que habla a través de los ojos, que habla a través de los silencios, que tiene una fuerza increíble y que obviamente está pasada por el filtro del recuerdo de Alfonso Cuarón", expresó el crítico.

El cineasta ha defendido su película y lo que para él significa

Aunque Yalitza tiene oportunidad de ganar el Oscar, tiene, al mismo tiempo, una posibilidad de regresar a su entorno, de que siempre sobresalga por haber sido Cleo, la representación de Libo en el ensueño de Cuarón.

"Habrá que ver cómo es Yalitza diciendo diálogos, interpretando a un personaje ajeno a su entorno, porque si no Cleo la va a perseguir el resto de su vida y de ahí no va a salir", advirtió Valdés.

Lo cierto es que Yalitza es, hoy en día, gracias a Alfonso Cuarón, la figura femenina del momento, cayó en blandito con un director que por primera vez se conecta de una manera muy profunda con quién es, de dónde viene, de donde nace, de dónde brota lo que es su sensibilidad, y las conjunciones en la historia del cine son importantes.

"A lo mejor si Yalitza hubiera hecho algo con Reygadas o Amat Escalante, hubiera tenido otro sentido su participación, y cayó en manos de Alfonso Cuarón. Sii el año pasado hubiera caído con Guillermo del Toro, pasaría exactamente lo mismo, son gente muy sensible, son gente que sabe utilizar todas las herramientas y hacer de los actores algo fuera de serie, y que bueno que Alfonso pudo dirigir a una no actriz, darle un personaje bellísimo que también ella supo interpretar y darle una personalidad".

Si bien este es un nuevo espacio para Aparicio, también lo es para Cuarón, quien se destaca por ser un cineasta que defiende y protege sus películas y no se alineó a que su filme solo fuera reproducido en la plataforma de Netflix, quien le tendió los medios para hacer esta producción que tanto ama. 

"Cuarón siempre se ha caracterizado por ser muy incendiario alrededor de sus propias películas, las defiende muy apasionado, lucha por lo que él considera", agregó Valdés, hoy director del Centro de Estudios en Ciencias de la Comunicación.

"Esa doble pelea la ha estado llevando en todos los aspectos que tiene que ver con Roma, es decir, el producir una película para una plataforma en la que las reglas son 'se ve en la plataforma, no se puede ver en otra pantalla', porque ese es su mercado, y peleó porque se vea en las salas de cine".

Pero lejos de los debates que ha abierto Aparicio en la industria del cine, hay un diálogo que ve en ella un reflejo de una sociedad y una coyuntura de la que ella se siente orgullosa.

"Como hija de una empleada doméstica y siendo indígena, estoy orgullosa de que esta película ayude a aquellos de nosotros que se sienten ignorados para que sean vistos. Me siento muy agradecida con la Academia por el reconocimiento a Roma y, sobre todo, con Alfonso, por haberme permitido ser parte de su visión", señaló Aparicio a través de un comunicado de prensa.