Beyoncé volvió al escenario en el Festival de Coachella e hizo historia convirtiéndose en la primera mujer negra en ser convocada como artista principal.
"Coachella, gracias por permitirme ser la primera mujer negra en encabezar la programación del día", expresó emocionada.
La diva superó todas las expectativas generadas en torno al concierto, debido a que había prometido compensar a todos aquellos que el año pasado quedaron decepcionados cuando la cantante debió suspender su show por órdenes médicas que no le permitían hacer esfuerzos físicos debido a su embarazo de mellizos.
Queen B se presentó ante un público de 100.000 espectadores en un recital que duró dos horas y contó con colaboraciones especiales.
La intérprete causó revuelo y sorprendió a sus fanáticos al reunir a su antiguo grupo, Destiny's Child, que no se presentaban juntas desde el show de medio tiempo del Super Bowl de 2013. El grupo, que festeja su aniversario número 20, cantó los populares temas "Say My Name", "Lose My Breath" y "Soldier".
Beyoncé también cantó junto con su marido, Jay-Z, el tema "Deja Vu", y con su hermana, Solange Knowles, bailaron sensualmente el single "Get Me Bodied".
"Estoy muy feliz de encontrarme aquí. Se suponía que iba a actuar el año pasado, pero acabé quedándome embarazada… ¡Gracias a Dios! Así que no me quedó otra opción que soñar y soñar y seguir soñando con este momento mientras dos criaturas crecían en mi vientre. Gracias por compartirlo conmigo. ¡Espero que hayan disfrutado del show!", se despidió Beyoncé para concluir su regreso al escenario.