Los secretos del centro de rehabilitación elegido por ricos y famosos para tratar sus adicciones

El sitio web asegura que la recuperación puede comenzar hoy. La posibilidad de encarar traumas emocionales no resueltos mediante el desarrollo de las herramientas necesarias para "transformar tu vida", una de las tantas promesas anunciadas. Pero, ¿qué hace que las figuras más reconocidas del entretenimiento, la moda y los negocios elijan tratarse en un centro de Arizona?

A simple vista The Meadows no parecería ser muy distinto a la infinidad de centros de tratamiento de adicciones que surgieron en los EEUU tras la apertura del primer centro Betty Ford allá por 1982, uno que puso en el candelero la problemática del consumo de drogas y ayudó a que dejase lentamente de ser un tabú declararse dependiente a sustancias o a comportamientos nocivos.

Pero es específicamente este centro ubicado en el estado de Arizona el que ha ganado notoriedad en las últimas semanas, tras ser elegido por figuras que han visto sus carreras y sus vidas personales destruidas tras el surgimiento de una cantidad de denuncias de acoso y abuso sexual, que lograron barrer por completo con el respeto y prestigio de parte de sus colegas, seguidores y miembros de la prensa.

Es precisamente la sede exclusiva para hombres conocida como Gentle Path, enfocada específicamente en el tratamiento de adicción al sexo, la que habría recibido tanto al productor Harvey Weinstein como al actor Kevin Spacey tras el estallido de sendos escándalos de cobertura mundial.

Contrario a lo que se suele creer acerca de los centros de rehabilitación elegidos por los más poderosos de los EEUU, las condiciones de vida dentro de la facilidad distan de ser las de un hotel cinco estrellas. En el caso particular de Gentle Path, las habitaciones son de tipo residencia universitaria con capacidad para dos personas, donde cualquier dispositivo electrónico se encuentra prohibido y el acceso a libros y revistas que puedan llegar a despertar sentimientos contraproducentes no está permitido.

Distintas imágenes salieron a la luz los últimos días en las que se puede ver a Spacey, quien fue acusado de haber acosado y abusado a múltiples hombres a lo largo de las últimas décadas, cargando una colchoneta para yoga camino a una clase dentro del establecimiento de rehabilitación. A mediados de octubre, Weinstein fue visto en el mismo centro, a pesar de que varios reportes aseguran que está siendo tratado actualmente mediante atención ambulatoria.

Ubicado en Wickenburg, Arizona, a unos 100 kilómetros de distancia de la ciudad de Phoenix, The Meadows ha venido siendo elegido durante los últimos años por las figuras más influyentes de distintas industrias para tratar los mencionados trastornos vinculados a comportamientos sexuales así como adicciones a las drogas, desordenes alimenticios, problemas vinculados al juego y depresión.

Fundada en 1975 por Pat Melody, un veterano de la Fuerza Aérea que cayó preso de las drogas y el alcohol, el centro comenzó ofreciendo programas para personal militar que participó de la guerra de Vietnam. Más tarde se convertiría en el lugar elegido por personas acaudaladas de Hollywood para tratar sus vicios. El costo de un tratamiento promedio en el centro Gentle Path vinculado a las adicciones sexuales suele alcanzar los USD 58 mil por un programa de 45 días.

Fue allí donde en 2010 el golfista Tiger Woods decidió tratar la adicción al sexo que lo llevó a poner en jaque su carrera como deportista de elite y su vida familiar. En el mismo sitio, la modelo británica Kate Moss y la empresaria de la moda Donatella Versace trataron su adicción a la cocaína, Elle Macpherson lidió allí con su depresión post parto tras el nacimiento de su segundo hijo y en el mismo sitio Selena Gomez se recuperó de su quimioterapia vinculada al lupus.

Los tratamientos en The Meadows duran en promedio unos 45 días y suelen comenzar con sesiones de entrenamiento en el gimnasio a las cinco de la mañana. Poco más tarde, alrededor de las siete de la mañana, los pacientes toman su desayuno buffet que puede incluir huevos revueltos, granola y fruta a medida que conversan con sus especialistas sobre su progreso y evolución hacia la recuperación.

El acceso a la televisión se encuentra limitado y son las señales de noticias y del mundo del entretenimiento las que en la gran mayoría de las ocasiones se encuentran directamente bloqueadas por completo. Los periódicos no están  prohibidos pero el personal a cargo recomienda a los pacientes mantenerse lo más desvinculados posible de lo que se esté diciendo sobre ellos en los medios impresos.

Distintos programas enfocados en la meditación buscan ayudar a los pacientes a mantenerse alejados de decisiones impulsivas que puedan a llevar a comportamientos auto destructivos, mientras que las sesiones de "comunidad" lideradas por psicólogos suelen agrupar a varias personas para que compartan sus historias personales.

Métodos relativamente nuevos como la terapia de desensibilización y reprocesamiento por movimiento ocular (EMDR), es utilizada para tratar a los pacientes adictos al sexo mediante distintos pulsos luminosos y auditivos, lo que puede "cambiar la forma en la que el cerebro responde a los estímulos externos". El tratamiento también es utilizado para tratar el estrés post traumático y está diseñado para liberar emociones reprimidas ligadas a experiencias negativas del pasado.

Los pacientes que concluyen su tratamiento reciben un medallón que les recuerda el hito alcanzado, pero los especialistas aseguran que la cura absoluta no existe y correrá por cuenta de los ex adictos poder reincorporarse de forma plena y saludable a la sociedad.

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