Kevin Spacey ingresó a un lujoso centro de rehabilitación de USD 36.000 al mes en el desierto de Arizona para recibir tratamiento por su adicción al sexo, indicaron fuentes al tabloide Daily Mail. La clínica de élite llamada Meadows es popular entre las celebridades y ha tratado a estrellas como Tiger Woods, Elle Macpherson, Kate Moss y Selena Gomez.
Spacey "se está tomando el tiempo necesario para buscar tratamiento", dijo su representante en un comunicado el miércoles pasado, dos días después de conocerse la denuncia pública de Anthony Rapp, quien aseguró que la estrella de House Of Cards acoso sexualmente de él cuando tenía 14 años durante una fiesta en 1986.
Vía Twitter, el actor dijo no recordar nada de lo sucedido y aprovechó para hablar abiertamente de su homosexualidad, una actitud muy criticada en Hollywood, por pretender, con esa revelación, desviar la atención ante el escándalo que se aproximaba.
La semana pasada medios locales indicaron que Harvey Weinstein también estaba buscando tratamiento en Meadows. Fue visto disfrazado en un restaurante local en Phoenix.
El centro afirma tener el mejor programa para tratar la adicción al sexo en los Estados Unidos. Durante su estadía allí, el actor podrá realizar yoga, tai chi, y meditación. Además, la instalación cuenta con un gimnasio, una piscina y áreas de relajación.
Es un tratamiento de 45 días llamado "Sendero apacible" en el cual los pacientes se someten a asesoramiento y artes expresivas para tratar y enfrentar sus problemas.
Spacey además fue denunciado por abuso y acoso por trabajadores de House of Cards, ficción que ya no protagoniza luego de ser despedido por Netflix el viernes pasado.
El dos veces ganador del Oscar también fue señalado por el hijo de Richard Dreyfuss, quien alegó que Spacey lo manoseó cuando estaban en el departamento del actor con su padre.
El joven dijo que se animó a contar su historia por todos los escándalos que han surgido desde que estalló el caso de Harry Weinstein y desde que miles de mujeres contaron sus historias de abuso sexual a través de la campaña #MeToo en redes sociales.
Luego de la denuncia, Richard Dreyfuss salió apoyar a su hijo vía Twitter: "Amo a mi hijo más que lo que todas las palabras en el mundo pueden explicar. Estoy muy orgulloso de él".
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