La orca Lolita, por más de 50 años la estrella del Miami Seaquarium, puede quedar en libertad próximamente. Por primera vez, los administradores del acuario declararon que están dispuestos a colaborar con los esfuerzos para regresarla a su hábitat natural. También conocida como Tokitae o Toki, la ballena de 56 años vive en cautiverio desde 1970.
Eduardo Albor, director ejecutivo de Dolphin Company, propietaria del lugar, declaró en conferencia de presas que su gestión está “100% comprometida” en los esfuerzos para transportar a Lolita a sus aguas nativas cerca de Puget Sound, en el océano Pacífico norte, donde fue acorralada y capturada.
El pasado marzo Lolita fue retirada de sus funciones, en cumplimiento del nuevo acuerdo de licencia entre el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) y Dolphin Company, que prohibió que se le hiciera actuar y se exhibiera al público.
Los acuarios solo puedan mostrar ballenas o marsopas como entretenimiento si obtienen (o renuevan) una licencia especial de expositor con USDA. Para que eso ocurra, las condiciones de vida de estos mamíferos marinos deben cumplir con los estándares mínimos establecidos en la Ley de Bienestar Animal.
En el caso de una orca, la dimensión horizontal mínima de su estanque debe ser suficiente para que pueda nadar dos veces el largo de su cuerpo en una misma dirección.
En 2017, un inspector de USDA pareció admitir que el estanque de Lolita no cumplía con los estándares mínimos, pero en aquel entonces la agencia no cerró el espectáculo. Esta vez, en lugar de renovar la licencia del acuario tal cual estaba, como solían hacer, la decisión del USDA resultó en el retiro de la ballena del escenario público.
Durante mucho tiempo los grupos defensores de los animales han abogado por la liberación de Tokitae. Por ese motivo, el reciente anuncio fue recibido con entusiasmo.
Jared Goodman, abogado y vicepresidente de Personas por el Trato Ético a los Animales (PETA), expresó al semanario New Times: “Nos alegra saber que Dolphin Company sigue comprometida con el traslado de Lolita después de décadas de estar atrapada en el tanque de orcas más pequeño del mundo”.
Pero para trasladar a la orca a su hábitat natural todavía quedan varios obstáculos por vencer. Lo primero sería obtener la aprobación de las agencias federales, como la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) y el USDA.
Además, Tokitae ha estado lidiando con una enfermedad respiratoria desde su retiro. Incluso, en un momento estuvo cerca de la muerte. Para tratarla, es necesario traer un antibiótico especial desde Japón, gracis al cual se ha estabilizado. Sin embargo, aunque ha mejorado, aún tiene sus días malos.
Por ahora se considera moverla de su estanque de 24 metros de largo y 11 metros de ancho a un recinto más espacioso.
“Simplemente lo estamos tomando día a día y aprendiendo de Dolphins Company y los veterinarios”, expresó la alcaldesa del condado Miami-Dade, Daniella Levine Cava. “Tenemos un equipo de profesionales”.
Para la recuperación de la ballena, el grupo Friends of Toki ha estado trabajando con el acuario en mejorar la calidad del agua de su estanque, e instalando nuevos filtros y enfriadores que pueden bajar la temperatura a menos de 13ºC, la temperatura a la que tendrá que acostumbrarse para el viaje de regreso a casa.
“Lo primero es su salud y cuidarla tanto como podamos aquí y luego queremos esperar lo que sea posible”, dijo Pritam Singh, quien dirige Friends of Toki. “Por supuesto, lo mejor sería traerla de vuelta al lugar de donde vino”.
Singh también comentó que su grupo ha tenido conversaciones iniciales con NOAA y USDA.
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