La Comisión Federal de Comunicaciones estadounidense (FCC, por sus siglas en inglés) prohibió este viernes los dispositivos de las marcas chinas Huawei Technologies Co. y ZTE Corp. Esta medida es una continuación del esfuerzo por limitar el alcance y la influencia de estas compañías en las redes del país, con el que desde hace años Washington está comprometido.
La orden difundida este viernes por la FCC alcanza también a dos proveedores de cámaras, Hangzhou Hikvision Digital Technology Co. y Dahua Technology Co., así como al fabricante de radios bidireccionales Hytera Communications Corp.
En un comunicado difundido por la Comisión, la presidenta de la entidad, Jessica Rosenworcel, aseguró que “la FCC se compromete a proteger nuestra seguridad nacional garantizando que no se autorice el uso de equipos de comunicaciones no confiables dentro de nuestras fronteras, y continuaremos con esta labor”.
“Estas nuevas reglas son una parte importante de nuestras acciones en curso para proteger al pueblo estadounidense de las amenazas a la seguridad nacional relacionadas con las telecomunicaciones”, continuó poniéndo énfasis en el peligro que la presencia de estas compañías chinas representa, según la inteligencia de Estados Unidos.
La votación fue unánime y consiguió fácilmente luz verde. Si bien aplica de manera directa a futuras autorizaciones de compra de los equipos, también se podría revocar las ya emitidas.
El comisionado republicano de la Comisión, Brendan Carr, dijo que “como resultado de nuestra orden, no se puede aprobar ningún equipo nuevo de Huawei o ZTE. Y no se puede aprobar ningún equipo nuevo de Dahua, Hikvision o Hytera a menos que aseguren a la FCC que sus equipos no se utilizarán para la seguridad pública, la seguridad de las instalaciones gubernamentales y otros fines de seguridad nacional”.
Esta medida significó un paso más en esta lucha de Washington, que se vio intensificada durante la presidencia de Donald Trump -entre 2017 y 2021- y continúa en el mandato del actual mandatario, Joe Biden. En el pasado ya se habían tomado medidas para frenar el acceso a la información por medio de controles de exportación y prohibición de equipos y software clave.
También, el pasado junio, Biden había actualizado la lista de empresas chinas cuyos alcances quedaron fuera del alcance de los inversores locales.
En tanto, un grupo de funcionarios estadounidenses propuso restringir la plataforma TikTok, extremadamente popular entre los jóvenes, pero con altas sospechas de que sea la puerta de entrada de las autoridades chinas a los datos de los millones de usuarios.
A su vez, en 2018, el Congreso ya había aprobado una disposición por la cual se prohibió que las agencias federales compren equipos a las cinco compañías señaladas por la FCC y se estableció, por otro lado, que las empresas no sean elegibles para recibir subsidios federales ni hacer negocios en el país.
El Reino Unido se sumó a la medida
Este jueves, el Gobierno británico avanzó con una medida similar, por la que prohibió el uso de cámaras de seguridad provenientes de Beijing en sus ministerios y departamentos estatales.
La medida alcanza estas zonas consideradas “sensibles” ya que, según comentaron funcionarios del Reino Unido, la legislación china obliga a las compañías Hikvision y Dahua a compartir con las autoridades del régimen todos los datos recopilados.
En el pasado, estos dispositivos ya habían sido el centro de polémicas que provocaron -entre otras- la renuncia del secretario de sanidad tras conocerse un video del interior de su despacho captado por dichas cámaras besando a una ayudante.
(Con información de Bloomberg y AP)
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