El huracán Ian ya es considerado como uno de los más mortíferos en la historia tras su paso por el estado de Florida. Hasta el momento, las autoridades han confirmado el fallecimiento de al menos 115 personas, cifra que lamentablemente se espera que siga en aumento.
Según los primeros datos entregados por la comisión de examinadores médicos del estado, los más de cien fallecimientos confirmados ocurrieron tanto durante el paso del huracán, como antes -mientras los residentes se preparaban- y después -intentando reparar lo dañado-.
Por el momento, la persona más joven fallecida durante Ian es una mujer cubana de 19 años, que venía junto a un grupo de otros siete migrantes en una embarcación precaria hacia la Florida. Su barco naufragó por el mal tiempo a pocas millas de distancia de la costa de Cayo Hueso y todos fallecieron.
La persona más anciana que se haya confirmado que falleció es un hombre de 96 años en el condado de Charlotte, quien se ahogó tras quedar atrapado bajo un vehículo estacionado intentando refugiarse de la inundación. En general, la mayor parte de los fallecidos eran mayores de 60 años, siendo la edad promedio de muerte confirmada hasta el momento de 73 años.
Ya la semana pasada, con muchos menos casos de muertes confirmadas, el gobernador Ron DeSantis advertía que muchos de los fallecimientos en estos casos suelen darse después de las tormentas.
“Hemos visto en las últimas tormentas que han afectado al país que suele haber más fatalidades después del huracán que durante el paso del mismo, por una gran variedad de razones”, explicaba DeSantis.
Y así parece estar ocurriendo con Ian. Llaman la atención al menos dos casos confirmados de suicidio tras el paso del huracán, al parecer por la desesperación de haberlo perdido todo. Ambos ocurrieron en el condado de Lee -el más afectado- y se trató de dos hombres, uno de 70 y otro de 73 años.
Otros casos que preocupan son los de personas bajo tratamiento médico con necesidad de estar conectados a máquinas de oxígeno que murieron por la falta de energía eléctrica, o el caso de un hombre de 82 años que falleció por una falla cardíaca después de que al evacuar su casa en el condado de Lee se olvidara de sacar sus medicinas.
Pero la mitad de los fallecidos murieron por ahogamiento. Las autoridades, que no confirman identidades para dan detalles de los casos, confirmaron que por lo menos ocho personas se ahogaron mientras se encontraban en sus vehículos intentando llegar a un lugar seguro.
El condado de Lee ha confirmado 55 muertes, aunque hay zonas que aún están inundadas a las que no se ha logrado pasar por el momento. En segundo lugar se encuentra el condado de Charlotte donde se confirmaron 24 fallecimientos.
Pero la extensión geográfica del impacto del huracán Ian en Florida es tal que se reportaron muertes en 12 condados más, desde los cayos al sur hasta la zona norte del estado.
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