Poco se sabe de lo que pasó, pero por el momento todo es alegría en la casa de los Gonzalez en la ciudad de Miramar, en el condado de Broward al sur de la Florida. Victoria Sophia González, de 14 años, había sido vista por última vez el 17 de septiembre de 2021 cuando su tía la llevó a clases en la escuela media New Renaissance, de la ciudad de Miramar, donde cursaba octavo grado.
Según las autoridades escolares, la joven se retiró sola caminando aquel día, como lo hacía a diario, al finalizar el día escolar. Pero a diferencia de los otros días, aquel 17 de septiembre Victoria no llegó a su casa.
Desde entonces su familia la buscó incansablemente. Se organizaron vigilias por su desaparición. Su padre repartió miles de volantes en todo el sur de la Florida con la cara de Victoria. La policía de Miramar llevó el caso a las organizaciones internacionales, donde nada se descartó: desde un escape voluntario hasta la posibilidad de que haya caído como víctima de una red de tráfico de personas.
El pasado fin de semana, la familia de Victoria organizó otra de sus vigilias en un parque cercano a su hogar. Familiares, amigos y hasta el perro de Victoria fueron a prender velas y a repartir más volantes con la foto de la jovencita, conmemorando que hacía un año que había desaparecido. En un año nada sabían de ella, nadie había jamás llamado para hablar de su paradero.
Pero todo cambió tres días después del aniversario de su desaparición. Sin dar demasiados detalles, la policía de Miramar confirmó que una persona se contactó con los padres asegurando saber dónde estaba Victoria. De inmediato le pidieron fotos que comprobaran que se trataba de la adolescente y le pasaron la información a la policía. Las autoridades localizaron rápidamente a la menor que estaba sana y salva en el condado de Miami-Dade, a menos de 30 minutos de la casa de sus padres.
“Saber que ella está aquí con nosotros, es una alegría que no puedo explicar. Solamente es una paz que tengo encima, saber que ella ya está protegida, con nosotros, durmiendo en su camita, en su cuarto”, dijo a la prensa local Sofía de la Ros, madre de la adolescente.
“Recibimos información de su posible ubicación a través de redes sociales y le dimos el tip a la policía. Esa misma noche la policía me envió dos fotos nuevas, y era ella. Finalmente nos reunimos con ella y fue una gran alegría”, comentaba Enrique González, el padre de Victoria.
No se sabe dónde estaba ni cómo fue encontrada. Tampoco se sabe si estaba sola, o qué hizo durante todo ese año. Es probable que haya una investigación penal en paralelo si es que alguien colaboró con esta desaparición, pero las autoridades no han hecho pública esta información.
“Por ahora es serenidad, paz, tranquilidad, que ella vea a su familia, amor (…) Saber que ella tiene el apoyo de nosotros, de la familia, de su padre. Lo demás, ya eso va a venir, lo dejamos en las manos de los oficiales. Ella está bien, se siente contenta”, confirmaba la mamá.
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