Estados Unidos celebró que tanto la coalición internacional liderada por Arabia Saudí como los huthis hayan aceptado la tregua de dos meses propuesta por la organización y llamó a todas las partes para que se adhieran a este alto al fuego “por el bien del pueblo yemení”.
“Más de siete años de lucha han causado gran sufrimiento y destrucción en todo el país. Los yemeníes exigen la paz. Es hora de que las partes los escuchen y aprovechen este momento decisivo”, dijo el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, en un comunicado.
Así, Blinken subrayó que hay que centrar los esfuerzos “en asegurar un alto el fuego duradero y participar en un proceso político inclusivo” dirigido por el enviado especial de la ONU para Yemen, Hans Grundberg, “cuyo apoyo trabajará en estrecha colaboración con el enviado especial estadounidense, Tim Lenderking”.
“Continuaremos trabajando en estrecha colaboración con la ONU para apoyar la tregua que, si se implementa por completo, detendría los combates y los ataques durante al menos 60 días y facilitaría el flujo de bienes y personas, brindando el alivio que tanto necesitan millones de yemeníes mientras observan el mes sagrado del Ramadán”, aseguró.
Las partes beligerantes en el Yemen, cuyo conflicto ha derivado en la peor crisis humanitaria del planeta, según la ONU, alcanzaron este viernes un acuerdo para un alto el fuego integral de dos meses y que dará inicio este sábado, coincidiendo con el comienzo del mes sagrado musulmán del ramadán.
Esta tregua, una de las más extensas desde que se inició el conflicto en 2014, fue anunciada por el enviado especial de la ONU para el Yemen, Hans Grundberg, y se logró tras unas largas conversaciones con los grupos beligerantes con la promesa de levantar el bloqueo de las principales instalaciones controladas por los rebeldes hutíes.
“Las partes en conflicto han respondido positivamente a la propuesta de Naciones Unidas de una tregua de dos meses que entrará en vigor mañana, 2 de abril, a las 19.00 horas”, dijo el enviado de la ONU en declaraciones reproducidas en un comunicado.
La importancia de esta tregua se debe, además, a que las partes no solo aceptaron detener sus operaciones militares dentro del Yemen, sino que también “más allá de sus fronteras”, según la nota, en referencia a los ataques con misiles y drones hutíes contra Arabia Saudí.
El cese de hostilidades se ha anunciado en un momento en el que están en marcha unas consultas intrayemeníes en Riad -en las que los rebeldes hutíes no participan- con el objetivo de buscar una hoja de ruta y poner así fin a este sangriento conflicto que ha segado miles de vidas.
Los insurgentes, respaldados por Irán, se negaron a acudir a la cita al celebrarse en Arabia Saudí, país que lidera una coalición militar desde 2015 en apoyo al Gobierno internacionalmente reconocido del presidente Abdo Rabu Mansur Hadi, exiliado en Riad.
(Con información de Europa Pres y EFE)
SEGUIR LEYENDO: