Una tiktoker de Florida contó recientemente una experiencia traumática en la que un acosador apareció en la casa de su familia en 2020 y disparó una escopeta hacia su residencia.
La joven, que ganó una legión de fanáticos por publicar videos divertidos en TikTok, narró la experiencia en una entrevista con el New York Times. Ava Majury creó una cuenta en la red social en 2020 cuando tenía 13 años y apenas en un año ya tenía más de un millón de seguidores gracias a sus videos bailando y haciendo lip sync con las canciones de moda.
Durante la primera parte de la pandemia, la adolescente notó que seguía recibiendo mensajes de un fan en particular en tres de sus plataformas de redes sociales: Tiktok, Snapchat e Instagram.
Majury le dijo al New York Times que desde el principio respondió al usuario, Eric Rohan Justin, de 18 años, como lo hizo con muchos fanáticos, con saludos generales.
“Solía responder a mis fanáticos, como ‘Oye, ¿cómo estuvo tu día?’”, le dijo al periódico.
Pero a partir de ahí, sin que Ava lo supiera en ese momento, Justin logró conectarse con algunos de los compañeros de clase de Ava, pagándoles a cambio de fotos de ella y su número de teléfono celular.
Ava dijo que dejó de seguir a sus amigos de Florida y de Nueva Jersey, donde vivía la familia antes de mudarse a Naples en 2019.
“Todos a mi alrededor decían, ‘Oh, te vas a volver ‘Hollywood’ con todos nosotros, ya no querrás hablar con nosotros’. Y yo estaba como, ‘Estás vendiendo mis cosas’”, recordó.
Ava, que gana miles de dólares en acuerdos de patrocinio como influencer, recibió permiso de sus padres para venderle a Justin algunas selfies que ya se habían compartido en Snapchat.
“No estaba enviando nada de mi cuerpo”, dijo Ava. “Eran solo fotos de mi cara, que es lo que supongo que estaba pagando. Todo lo mío es mi bonita sonrisa, ese es mi contenido”.
Pero poco después, Justin comenzó a enviarle mensajes en Venmo, solicitando “fotos de trasero” y fotos de sus pies a cambio de dinero.
En ese momento, Ava bloqueó a Justin en todas sus cuentas, pero él insistió: le envió tres pagos por un total de más de 600 dólares y le rogó que lo desbloqueara.
El padre de Ava, Rob Majury, un teniente de policía retirado, le ordenó a Justin por mensaje de texto que dejara de contactar a su hija.
El comportamiento de Justin a partir de ahí tomó un giro amenazante. Se puso en contacto con uno de los compañeros de clase de Ava y comenzó a planear su ataque, según los mensajes de texto proporcionados al Times.
Justin le preguntó al compañero de clase si tenía acceso a un arma. En un mensaje de texto, escribió: “Creo que podría romper la puerta con una escopeta”.
La familia de Ava se enteró de que Justin vivía cientos de millas al norte, lo que alivió algunos de sus temores.
Al principio, su padre descartó a Justin como “uno de estos vaqueros del teclado”.
“De alguna manera desacredité lo que podría haber sido una amenaza”, dijo al Times.
Pero el plan amenazante de Justin se convirtió en una horrible realidad el 10 de julio de 2020, cuando irrumpió en su propiedad y disparó un cartucho de escopeta a través de la puerta principal.
“Todo lo que recuerdo es que lo escuché, lo sentí en mi pecho, miré hacia arriba y había un agujero en mi puerta por los fragmentos”, recordó Ava.
Su padre saltó de la cama y corrió hacia la puerta principal, donde vio a Justin en el jardín delantero. La madre de Ava llamó al 911.
El teniente de policía retirado fue a perseguir al joven pistolero, pero tropezó y cayó, momento en el que el sospechoso huyó.
El padre agarró su pistola y montó guardia hasta que llegó la policía. Pero antes de que lo hicieran, Justin regresó.
El padre de Ava le ordenó a Justin que soltara la escopeta, pero él se negó y, en cambio, lo apuntó, lo que provocó que el padre abriera fuego y matara al acosador.
La policía encontró a Justin con dos teléfonos celulares que contenían miles de fotos de Ava.
“El sujeto probablemente era un acosador que resultó de la amplia participación de su hija en las redes sociales”, decía el informe de la Oficina del Sheriff del Condado de Collier.
La investigación está en curso. El padre de Ava dijo que la policía le dijo que el tiroteo era justificable según la ley estatal de “mantenerse firme”.
A pesar de la dramática experiencia, Ava permanece en TikTok y otras plataformas.
La madre de Ava, Kim Majury, le dijo al Times que no quería permitir que “individuos enfermos” obligaran a su hija a dejar las redes sociales.
“¿Por qué deberíamos permitir que la detuvieran? Tal vez ella está destinada a crear conciencia sobre todo esto”, dijo Kim Majury.
En cuanto a Ava, reconoció las ventajas de las ganancias de su estrellato en las redes sociales, pero dijo que la experiencia en general significa más para ella.
“Solo poder hacer sonreír a otras personas es lo que me gusta, el placer de ver el impacto que hice en la vida de algunas personas”, dijo.
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